Hija putativa 12.2
Cuando el se fue, continue desayunando en
silencio.
-
En un rato vas a tener tus
clases nena.
-
Si…
Y de a poco fui
despertándome de ese sueño. Aun no quería salir de ese mundo, pero empezó a
darse despacio.
Termine de
desayunar y me pare.
Creo que aun no
me sale sentarme con este jumper, me sente sobre el asiento, y la piel se me
quedo pegada a la madera, asi que al levantarme sentí un dolor horrible.
-
Au….- proteste sin querer en
voz alta.
-
Pobrecitaaaa, te dieron chas
chas otra vez?- Pregunto Paola, entre tierna y burlona abrazandome.
Normalmente
ahora le respondería mal, y ella me querria castigar, y asi empezaría nuestro
juego. Pero aun estaba atrapada en el mundo en el que me habían metido.
Sencillamente me quede abrazada a ella en silencio, y sentí la palma de su mano
apoyarse en mi espalda.
-
Tenemos que empezar las clases,
vamos- Dijo romina, y me llevo a mi aula.
Sin embargo me
costaba horrores concentrarme. Lo que había pasado fue tan lindo, era la prmera
vez que sencillamente me dejaba llevar…
-
Romina, estas escuchando la lección
o estoy hablando a la nada?
-
Ay no…
Me habían prometido
que si seguía portándome mal me tocaba cepillo. Odio tanto el cepillo. Iba a
disculparme, pero enseguida me tomo de la oreja y me hizo adoptar la posición para
varios dolorosos reglazos. No pude evitarlo y empece a llorar al tercero, pero
obedientemente los recibi todos y al ultimo me desplome llorando contra el
escritorio.
Senti sus mimos
en mi espalda, ella no suele mimarme cuando estamos en clases. Y escuche.
-
Rominita se que estas sensible,
pero el señor X me ordeno ser mas estricta con vos y necesito serlo…
Me pare y me
agarre la cola muy adolorida, me estaba permitiendo mucho. La mire con mis ojos
llenos de lagrimas y dije: Puedo pedir un favor?
Romina hizo una
sonrisa débil. Parecia que estaba queriendo ser estricta pero no podía.
Sin esperar a
que diga algo dije: Puedo usar de vuelta algunos de sus vestidos o ropa
infantil…?
Paula me miro
sorprendida. – Pero ahora tenes tus clases..- Dijo excusándose. Y luego
comento: Pense que los odiabas…
Me mire a mi
misma con el uniforme escolar, los jumpers son un poco infantiles pero: No… me
siento comoda asi.. quiero volver a verme chica.
Paula me miro y
se sonrio. –AY nena, me das problemas…- Dijo suspirando.
Luego me tomo de
la mano y me llevo a mi habitación.
-
Ya no tenemos mas vestidos,
hasta que la modista no traiga tu ropa nueva. Pero tenemos algo que puede
funcionar.—Comento. Me desnudo enterita, y luego se fue. Al volver trajo una
falda azul y una camisa blanca. Tomo una de mis bombachas mas infantiles y me
la puso, luego la falda azul con tirantes, y la camisa blanca. En mi cuello
hizo un moño.
-
Ya esta! Este uniforme es el de
las primarias japonesas. Una chica lo había usado en un cosplay- Se sonrio
Paula, como recordándolo.
Yo sonreí,
sientiendome de vuelta en ese mundo. Se veía mas infantil que el anterior.
-
Como te sentís?- Me pregunto
-
Mas comoda…- respondi. Y me recosté
abrazando mi oso. Senti una nalgada y patalee un poquito.
-
Se te ve la bombacha Romi!- Me
regaño Paula.
-
No me importa, soy chiquita-
Dije apoyando mi cara en el oso. – No quiero dejar de serlo… no quiero volver
al mundo adulto… soy feliz asi…- Dije y comencé a llorar.
Paula me tomo y
me recostó contra ella en sus piernas, luego me mimo la espalda.
-
Ya romi ya, contame que pasa?-
-
No lo se!!!- me queje. Y
continue llorando. Estube un rato, hasta que finalmente me tranquilize. Paula
me sento mirándola y me pregunto: Mas tranquila?
Asenti con la
cabeza. Y ella se paro: O me contas o volves a tus clases. Ya bastante te malcrie
con cambiarte de uniforme.
La mire
pensando, y me apretó las mejillas. – Te ves tan linda asi y la cara roja- Dijo
riéndose.
Es rara… Bueno,
al menos eso me hizo sentir mas normal. Ahora que lo pienso no se.. Pao siempre
es muy tierna conmigo, pero con… el señor X es diferente.
La mire un poco,
y luego apoye mi cabeza en ezoso. – Si vamos a clases no me vas a dar chas chas
por todo aunque este triste y distraída?-
-
Tengo que hacerlo.- Respondio
Paula. – Es mi trabajo- Bromeo.
-
Dah….- Proteste. – Es que… Ayer
cuando papi.. digo… el señor x… me castigo….- Intente explicar y paula se
sonrio.
-
NO TE RIAS!- Me queje y luego
me aleje de ella.
-
A ver, veni aca- Dijo Palmeando
su pierna.
La mire con cara
de pocos amigos y me queje: Estoy contando algo importante y solo queres
nalguearme.
-
El señor X me ordeno ser mas
estricta, no van a ser mucho vamos.
Otra vez… Fui y
me recosté. Es injusto, estoy intentando contar algo… y ….. Pero igual, o era
obediente o a la noche me tocaba cepillo.
Paf! Sono el
primer chirlo y ya patalee un poco. Tome a ezoso que aun estaba cerca y lo
abraze, aun me sentía dinminuta.
-
No podes salir del roll no?-
Pregunto Paula. – Estas demasiado sensible.
-
No solo no puedo!- exclame. –
No quiero hacerlo… Cuando lo haga voy a empezar a sentir culpa y todas esas
emociones horribles…. Quiero seguir pensando que soy una niña.
-
Una niña de papi? – Pregunto sonriéndose.
Iba a gritarle y
a responder mal, pero solo hice una pataleta quejándome y luego me quede quieta
esperando las próximas nalgadas.
-
Es eso? Romi no tengas tanto
miedo yo pase por lo mismo…
-
No sigas hablando sino voy a
salir y me voy a sentir mal…- Proteste. – Mejor termina de darme mis chas chas
y volvamos a clases.- Dije suspirando.
Ella continuo haciéndolo
pero a ritmo leve.
-
Romi, en la sumisión eso se
llama “entrega”. Hasta ahora solo jugaste a ser niña, jugaste a molestarme,
jugaste a todo eso. Pero no es lo mismo que ser la niñita de alguien…
Me enfade e
intente levantarme.
-
Basta de hablar!!!- me queje,
pero enseguida me atrapo y me dio una buena cantidad de chirlos, luego sentí como
me levantaba mi falda. Por lo general no me importaría, pero estaba sensible, y
metida en ese roll odioso, y todo me heria. Sin embargo la conversación tan
adulta me estaba haciendo salir del roll.
-
O que es lo que te hace sentir
tan mal? El señor X no es el ogro que vos te imaginas.
-
Me gusto…
-
Eso es?- Dijo Y sonriéndose.
-
Esta mal!
-
No esta mal, eso…
-
Bueno, ya terminaste de
nalguearme? Vamos a la clase: Dije enojada.
Si, no fue la
mejor respuesta que pude haber dicho. Paula me habrá dado 100 nalgadas mas que
me dejaron la cola como un tomate y ardiendo aun mas de lo que ya dolia.
Finalmente me levante, y por suerte ya había salido del roll y paula ya no
hablaba del tema.Al pararme me mire al espejo y pensé en voz alta. “Me veo tan ridícula…”
-
Vos lo habías pedido no?
-
Sh… No sigas.
Enseguida me
tomo de la oreja y me miro. – El cepillo te lo doy yo, o esperamos a la noche a
tu papa.
-
Tehehehehe… Perdon Señorita Y,
soy una angelita.
Paula suspiro y
dijo: Intento ser estricta pero no me sale… Al menos te vas a ganar tus reglazos. Y luego me
llevo de la oreja al aula.
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