Mi mama siempre fue religiosa. De hecho, todos los domingos
iba a misa. Yo no, y ella al principio lo respetaba. Cuando ya no pude salir
para nada, ella fue sola a misa. Pero esta vez... era distinto.
Apenas me desperte, me dio una fuerte nalgueada que me dejo
la colita hirbiendo de vuelta. Me prometio otra antes de irme a dormir, y dijo
que esperaba que eso cure mis ganas de portarme mal. Yo solo respondi
obedientemente como siempre, y me la pase con el incomodo pañal y el pijama l
resto de la mañana.
Pero luego, dijo que la acompañaria a misa. Supuse que no
habria problema, me desnudo, baño, pero luego vi que me ponia mi pañal de
vuelta.
- Mami, voy... a ir... con pañal?- Pregunte.
- Si nena, estas castigada. Acaso no recordas por que?-
Respondio. Naturalmente, me mori de verguenza pero respondi.
- PEro... Si alguien me ve y pregunta.-
- Respondes "Mi mami me castigo por responderle
mal" Ahora, no des problemas tan temprano.- Ordeno.
Suspire, apoyando mi mano sobre mi cara. "Al menos...
tan abultado no es... Capaz no se note bajo la ropa". Pense. Me puso una
linda camiseta, blanca, estampada con corazoncitos plateados, y saco del
armario, un vestido blanco, que parecia de comunion. Este si, con mangas
aglobadas y cuello bebe. Puse gesto de disgusto, y ella fruncio el seño. Pero
como niña buena, deje que me lo ponga hasta que al final, me veia como toda una
angelita. Mi mama, feliz, me saco mil fotos mientras que yo, veia el largo de
mi vestido al espejo. Tan corto no era, y tapaba bien mi pañal. Este, no se
veia abultado en el vestido. Sin embargo, el vestido continuaba siendo un
vestido de niña, y por ende tenia mucho vuelo. Me pare frente al espejo,
moviendome y viendo si se veia mi pañal. Si no era cuidadosa, se veia
perfectamente. Me preocupe, sabiendo que a mi mama le enorgullecia mas saber
que tenia una hija bien castigada por haberle levantado la voz. La mire
suplicante y tomo una de las "correas" que usaban las niñas de la
calle.
La mire alarmada y dijo: No reniegues, sino queres ir con la
cola aun mas roja.
Suspire cabisbaja, me puso la correa, y luego me dio el
peluche. - Luego seguro iremos a la casa de alguna amiga mia. Es para que te
entretengas." Aclaro. Parecia una bebe, con coletas con listones blancos,
peluche y siendo llevada. Me quede cabisbaja, deprimida por tanto castigo.
- Esto es por tu bien nena. Ya vamos llendo que se nos hace
tarde.-
Salimos, y ella me llevo del lazo. Me sentia muerta de
verguenza, mientras luchaba contra el viento que parecia obsecionado con
hacerme pasar la verguenza de mi vida. Al menos, otras niñas eran llevadas
tambien asi, y con vestidos blancos. Las mas pequeñas, tambien tenian vestidos
con mangas aglobadas. Llegamos a la misa, y me sente cuidadosamente, procurando
que nadie me vea.
Pase 2 horas muy aburridas, en donde me entretenia con la
oreja de mi oso, ya que no me gustaban las misas para nada. Desafortunadamente,
toda la ciudad parecia estar en esa iglesia de pueblo. Pero me convencia a mi
misma de que me veia... Bueno, normal dentro de todo.
Finalmente salimos, y volvi a batallar con el viento.
- Aprendiste el sermon?
- Si mami...-
- Esto te va a hacer bien bebe, yavas a ver.- Dijo y comenzo
a caminar. Yo miraba hacia ambos lados, me avergonzaba que me viera gente. La
mayoria me ignoraba, pero otros notaban que me veia demasiado aniñada para mi
"edad".
- Mami... vamos a casa de Elena?- Pregunte asustada.
- No, hoy no. Hoy solo vamos a casa de Sofia.
"Espero...que Sofia... no tenga hijos, marido o
nada".
Llegamos, se sludaron, me slaudaron, me dijeron las cosas
tipicas. Entramos.
"Que preciosa que se ve. Y que bien portadita."
dijo Sofia, mientras mi mama me sacaba el arnes.
- No tan bien portadita, nena, mostrale que estas usando.-
Dijo mi mama. Sonrojada, pero sintiendome obligada, levante mi vestido.
- Oh... tan rapido se porto mal? Que hiciste nena.
- Alze... la voz a mi mami.- Dije.
- Que mal señorita.
- Si...- Dije cabisbaja. No sabia bien que era correcto de
responder. Al final, otra vez, las 2 se pusieron a conversar, y yo me quede,
sentada sola y aburrida. Esta vez, ni celular tenia, debido a mi castigo.
"Tranquila, al menos... esto ya es lo peor que podia pasar. Y... no fue
tan malo. Y creo que nadie se dio cuenta" Pense. Aun continuaba muy
sensible por tanto castigo, y cuando sentia el ardor, me daban ganas de llorar.
Pero bueno... castigada. Ya aprendi mi leccion.
Esta vez, no hubo ni corral, ni silla alta. Comimos alla, y
a las 7 volvimos. Me saco mas fotos fascinada, y otra vez, me mando a dormir
con la cola como un tomate y llorando. Al menos, eso hizo que pueda dormirme a
las 8.
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Mi cola continuo al rojo vivo por 3 dias ya que hace
muchisimo que no era castigada tan fuerte. Y cuando revise mi facebook, ya
habia fotos de mis castigos antes de dormir y luego de despertarme. Ademas de
yo con mi vestido de comunion y mi pañal. Y todas las veces, que
accidentalmente mostre mis calzones o pañal, estaban retratadas en fotos. Lo
ultimo era preocupante, me veia muy ridicula con ese vestido, el arnes, mi oso
y el pañal asomando. El vestido era un poco mas corto de lo que pensaba y me
aterraba pensar que me hayan visto. De todas formas, no conocia a nadie en ese
pueblo mas que a las amigas de mi mama y a Rodrigo. Creo que es la unica con un
hijo.
En la semana, estudie, y rapidamente el buen desempeño en mi
escuela, se volvio parte de mi tarea. Tambien mi mama puso entre mis reglas,
muchos de los quehaceres de la casa. Salir al patio, dejo de darme tanta
verguenza, por que me vieron en la ciudad, asi que a veces salia para etudiar o
jugar un poco en los juegos, que el nuevo de bolsillo de mi mama le permitia
pagar. Ella era muy poco ambiciosa, y con tener a su hija ya le bastaba. No anhelaba demasiado mas, y
parecia feliz viviendo en su pueblo.
A veces, cuando estaba en el patio, escuchaba gritos de los
hijos de los vecinos, amenazas, y ruido de azotes. "En verdad es comun en
este pueblo" pense sobando mi aun adolorida cola. Era dificil salvarse de
algunas nalgadas que mi mama daba, por algun gesto que no le gustaba, o respuesta.
Para ella, debia ser la niña perfecta siempre. Tenia que responder a cada foto,
agradeciendo los elogios, respondiendo a cuando me etiquetaban, y prometiendo
portarme bien en las fotos de mis castigos. Mi mama, solia avisarme cuando no
lo hacia.
Habia dias, en donde usaba estos vestidos mas normales, o
jardineritos, o alguna falda, con una blusita con dibujos infantiles, y era
llevada a la casa de alguna de las amigas de mi mama, o a la tienda. De todas
formas, no permaneciamos mas tiempo en la ciudad. Hice un verdadero esfuerzo,
para no ir al rincon de vuelta. Pero funciono, esa semana no fui, y mi cola al
menos pudo volver a la normalidad. Todo el mundo, festejo, lo bien portadita
que era, hasta en FB y mi mama mostraba
un rostro de sastisfaccion enorme. Sin embargo, no bajaba nunca la guardia,
asegurandose siempre de que sea educada, hable bien responda bien, pida bien, y
amenazandome con su mano logrando que me sonroje al instante... y cumpla con su
orden. Sin embargo, el martes, fuimos de nuevo a casa de Elena. Yo andaba con
mi jardinerito. Era de falda, y tenia unos dibujitos en el pecho. Mi blusa era
al igual que mi bombacha, de hello kitty (A mi mama le encantan esas
combinaciones). Si bien, la falda era cortita, el viento no la levantaba por ser
jean. Asi que yo no estaba tan preocupada. Me encontraba coloreando, boca abajo
en la cama de Rodrigo cuando me dijo, asi de repente. - Tu mami siempre te
castiga muy fuerte no?...- dijo el. Me sente rapidamente, y me quede con la
cara como un tomate sin decir una palabra.
- No, por que lo decis!!- Dije, y de repente me senti re
tonta. Baje la cabeza sintiendo mi cara quemarse, y lo escuche reirse.
- No te preocupes.- Me dijo , revolviendome el cabelllo. -
Entiendo que te mueras de verguenza, pero es comun que a los chicos les pase,
ya te dije. Solo que tu mama es muy estricta...
- acaso.. se me ve o algo? Como te diste cuenta? Solo viste
cuando mi... mami me...- Dije, mientras la verguenza hacia que no me anime a
terminar la frase.
- A veces haces caras, y tambien.. a veces se te nota, como
recien que estabas acostada boca abajo. Tambien caminas raro, y te ves, muy
adolorida. Y a veces miras para ambos lados y te sobas con ambas manos. Se ve
muy tierno. - Se rio- Debe ser muy estricta contigo. Te dio con el cinto a la
mañana?
- No, no importa!- dije. - No quiero hablar de eso.-
Proteste, y continue coloreando, esta vez, intentando que no se me vea la cola.
"Como pude ser tan tonta de no darme cuenta." me regañe a mi misma.
- Los chicos de la ciudad, dicen que tambien vivis
castigadas. Y hasta dicen que a la misa fuiste con pañal y que apenas podias
sentarte.- Comento. Senti que hasta mis orejas y cuello se ponian rojos, pero
continue coloreando.
- Igual, no te preocupes. Cuando cumplas 15, seguro ya deje
de castigarte asi. Aunque hay una chica que tiene 16, y su mama la sigue
castigando. Siempre usa ese vestido amarillo tan feo...- Comento el con
disgusto. A mi podes contarme.
- No ... tengo nada que contar.- Respondi, y elresto de la
tarde, no me anime a hablarle, por pura verguenza nomas.
- Al menos me vas a contar, por que te castigo tanto?-
- Por alzarle la voz.- Dije, molesta por el interrogatorio.
El resto de la semana continue en roll de angelita, y luci
el mismo vestido en la misa, esta vez, sin pañal y sin ser llevada como un
perro. Sin embargo, mi facebook ganaba rapidamente popularidad. Me llegaban
invitaciones, y mi mama me obligo a aceptar algunas. "Son unos amigos que
conoci aca, vieron tus fotos y te quieren conocer." Dijo. Es muy injusto.
Todos sus amigos pueden ver fotos mias, pero yo no puedo añadir a nadie sin
permiso!! Hice un berrinche, que mi mami corrigio con un tiron de oreja y una
nalgada. Y que me perdono por portarme tan bien en la semana. "Acordate de
hablarles como una señorita, y no hacerme quedar mal." Aclaro.
"genial..." pense. Viendo mi facebook, note que
obvio, tenia fotos ahor haciendo mis quehaceres, y con mi nueva ropa. Entre los
elogios, habia siempre alguien molesto que decia. "Uy, yo quiero que me
hagan eso." Era un hombre, cuyo avatar era el mismo en pañales. Y era uno
de los que habia aceptado.
- Hola...
- Hola señor.- respondi molesta al mensaj viendo que era el.
Obvio, si no lo trataba como adulto, mi mama lo leeria.
- Vi todas tus fotos... que linda...-
- Gracias.
- A mi me gustaria que me vistan asi.
Suponia que la conversacion llegaria esto.
- Oki.
- Y que me nalgueen como a vos.
- Si.
- Y que me hagan usar pañales.
- Esta bien...
- Y que me obliguen a mojarme encima.
"Por que tengo que hablarle a este." Pense. Fui con
mi mama y me queje. "Mami, este señor me pregunta cosas raras..."
dije con un puchero.
- A ver bebe. - Dijo, sacandome el celular. Lo leyo y lo
bloqueo al instante. - Les adverti que nada de molestar a mi nena. Bebe, si
alguien te dice cosas que no te gustan me lo decis o les respondes que no te
dejo tener ese tipo de conversaciones si?
- Si mami...-
No fue necesario avisarle. De los 4 que añadi, solo quedo
uno solo, que de vez en cuando me escribia, preguntandome como me habia ido, y
comentando mis fotos. Si habia sido nalgueada, me preguntaba "Sigue
ardiendo tu colita"? Siempre, comentando algo sobre la ultima foto que mi
mama subio de mi.
Tambien, tenia mensajes en la carpeta de otros que a veces
revisaba. Por lo general los bloqueaba yo, a veces eran gente que ya habia
bloqueado. "Pfff... el facebook es peor que ese album de fotos"
pense. Me recoste boca abajo en mi cama... cuna. Y pense: "Ahora mi vida
es como un reality show, donde suben fotos de cada cosa que hago, y encima,
todos en esta ciudad me conocen como la "niña" que siempre andaba
adolorida y que "quiza" anda usando pañales." Proteste.
Si bien, Rodrigo decia que todo esto dejaria de pasar cuando
cumpla 15, ya tenia 22. No iba a crecer ni un centimetro mas ni iba a estar
peor. "Pero..." pense. Vi a mi oso de peluche y lo abraze.
"Pero... al menos es mucho mejor que la ultima vez... Y ... aca voy a
poder estudiar. Mi mami me paga los estudios... Si solo soporto... hasta
terminar mi carrera. Aparte, mi mami no es tan mala." Pense, sin admitir
que habia una buena parte de la humillacion, los castigos, y que me tengan
cortita que me fascinaba. De todas formas, me asustaba un poco. Mi mama
cambio... pero hasta ahora nunca tubo en cuenta lo que yo digo. Cuando algo me
parecia injusto y se me ocurria mencionarlo, solo terminaba aun mas castigada.
"Solo tengo que aguantar... " Pense. "Pero
ojala tubiera alguien a quien contarle y desahogarme. Este chico... siempre
pregunta que me pasa. Pero si me quejo, y mi mama revisa mi conversacion".
Pense, viendo el almanaque, con las cruces. Solo habia 2.
- Nena, seguis ahi, o estas en el rincon.- Pregunto el
chico.
- Emmm... estoy estudiando señor.
- Que niñita tan buena. Tu mami no se enojo contigo aun?.
- No...-
- Y que ropita usas?
- La de la foto, la que comentaste.
- Que tierna!!-
"pfff... " pense. Deje mi celular en la mesita de
luz, y me fui al comedor.
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Yo me encontraba en el rincon, cruzada de brazos y en medio
de un berrinche. De vez en cuando, el ardor hacia que cambiara mi pose de
enojada (que no servia de nada hacerla, pero no pensaba abandonarla) y pasara a
sobarme un poco mi adolorida cola.
Detras mio, en la mesa, escuchaba a mi mama, hablando con su
amigo carpintero.
- Mami, yo te dije que eso no lo necesito. Y la notebook es
mia, no es justo!!
- Bebe... Te estas portando realmente MUY mal hoy. Te acabas
de ganar tu rincon.
- No mami, no por favor, me porto bien!!
- Te vas a tener que portar MUY bien para poder salvarte de
el. Carlos. Estas seguro que va a quedar bien?
- Clarita, no te preocupes, va a quedar muy bien. Viste,
ella es la nena que te dije Roberto, no es un encanto?. Es un amor, dan ganas
de secuestrarmela.
- Ay si..Y es mil veces mas linda en persona. Que digo, un
millon!! Clara, ya casi termina de
formatearse, y cuando termine voy a instalarle el Nanny patrol. -
Di un pisoton apenas lo escuche. Mi informacion la
guardaron, al menos, pero...
"Nanny patrol!! Ese estupido programa bloquea todo
contenido para adultos!!! "
Todo empezo asi: Era temprano, pero ya hacia sol y estaba
caluroso. Apenas habia desayunado. Me dijo mi mama, que iriamos a la casa de su
amigo por algo muy temprano, ya que necesitabamos que un conocido de el le haga
un favor. Que llevara mi notebook asi estudiaba y mi peluche.
Se me hizo raro, que sea tan generosa como para dejarme
llevar mi notebook. Igual le hice caso.
"Me vas a cambiar para ir" pregunte. A lo cual
respondio: "No, es muy temprano para cambiarte. Prepara tus cosas y
vamonos". Si bien me dio verguenza, habia visto no solo niños en pijama,
sino que adultos tambien. Igual mi pijama, era muy vergonzoso para llevarlo a
la calle (Mameluco celeste, con oso adelante, y oso en la cola. Ademas de
abertura).
A mi mama no le importo, y al segundo yo caminaba por la
calle, intentando tapar mi cola con la notebook o mi oso. Cuando llegamos me
festejaron y abrazaron.... y me sacaron mi notebook!!!
- Si prometes portarte bien, te dejo salir del rincon. Sino
te quedas ahi hasta que el señor termine y los adultos terminemos de hablar.
Yo seguia emberrinchada. Otra vez, llevando las cosas fuera
de control. Suspire sin embargo y respondi: Si mami...
- Entonces sali y te quedas sentandita como niña buena y con
tu oso.-
Hice caso, mientras veia lo que le hacian a mi notebook.
- Unos minutos mas y ya va a estar instalado.
Mi mama, al verme sentada, aprovecho, y me improviso unas
coletas, ya que yo continuaba despeinada. Su amigo, reacciono con mucha
ternura: Awww, que bonita. Que bueno ser hija de una modista nena eh? SIempre
anda preciosa, vi tus fotos.
- Aunque ahora entiendo por que escapo. Mami era demasiado
estricta no?- Bromeo el otro. Molesta, baje mi cabeza, apoyandola en mi
peluche.
- Ya esta instalado. No es tan malo nena.
- Voy a poder usar youtube al menos...?- Pregunte.
- Nanny patrol solo bloquea cualquier contenido que no sea
adecuado para niñas como tu. No sabes lo peligrosa que es la internet. -
Comento una.
"Claro que es peligrosa, decimelo a mi" Pense.
- Todo lo que no sea para niños, sencillamente no lo podras
ver.- termino de explicar. Apoye una mano en la mejilla y suspire: Genial...
- Nena!- Me regaño mi mama. Yo no dije nada.
- Pobrecita, estubo tanto tiempo portandose bien.
- Yo necesito mis cosas.
- Estan aqui, en un pendrive. Las pase todas antes de
formatearla.
- Claro, que no podes tener cosas de adultos bebe, por eso
el pen-drive me lo quedare yo.
- Pero yo lo necesito!!- Dije, y vi la cara de mi mama. -
Para estudiar... tenia lo de mi escuela ahi. Los otros 2 se rieron y yo me
sonroje levemente. A mi mama no le causo ningun chiste.
- Mami, tu quieres que yo me porte bien en la escuela...
Pero necesito estudiar, y si no tengo lo mi escuela ahi donde estudio.
- Dime que libros necesitas, yo te los compro en la
libreria. Una nena se ve mucho mas linda leyendo un libro que estando con esa
cosa todo el dia. La notebook es solo para ayudarte.
Me cruze de brazos con mi peluche e hice puchero.
- Bueno Carlos, ya tenemos que irnos.
- Ayyy... Pero quedate con la nena un poquito mas. Es un
encanto.- Dijo, apretando uno de mis cachetes.
- Si, se v tan linda con sus berrinches y su pijamita. Hasta
me volveria hetero.
- Dije que nada de ese tipo de comentarios en frente de
ella.- Protesto mi mama.
- En serio, quedense un poco mas, comen aqui.
- No se carlos... viste como se comporta, anda terrible.
Tengo que cambiarle de ropa y darle una buena nalgueada, ya que ya la necesita.
Y hoy seguro se pasa el resto del dia en pañales por portarse asi.
- Mami!!!- Proteste, con la cara como un tomate. Ambos se
rieron.
- Asi en pijamita se ve muy tierna. En serio!! Y... Bueno,
si necesita un castigo podes castigarla aqui.
- Necesita su pañal tambien, con esto no basta.-
Mi cara se puso aun mas roja todavia. Y ser castigada en
frente de ellos. Igual, frente al carpintero me han nalgueado muchas veces.
Pero frente a su amigo no. Y como no tiene su vara ni su paleta aqui. Siquiera
sus pañales... Capaz me iba mejor.
- Tu tienes much trabajo hoy?
- No... -
- Entonces quedense y le das un buen castigo aqui. Con eso
ya aprendera a portarse bien. No es cierto nena?
Me estaba salvando de tener que usar pañales todo el dia.
Asi que asenti con la cabeza, aun con mi cara roja como tomate.
- Mira que amor que es, pobrecita, solo fue un berrinche y
fue un angel hasta ahora.
- Tenes algun instrumento que pueda usar?- PRegunto ella. Mi
corazon empezo a latir con miedo.
- Hay una cuchara de madera. Y mi cepillo es bastante
grande.
- Dejame ver. Nena, te quedas en el rincon. Te voy a
castigar aqui por esa boquita.
- Si mami...- Respondi resignada. Y me fui al rincon
obedientemente.
- Es un amor...- Dijo el carpintero y los escuche irse.
"Me salvo de estar en pañales todo el dia. Y
posiblemente todo el fin de semana... " Pense. Espere como 5 minutos o 10,
aunque los escuchaba conversar, mi mama, obvio, solo hablando de mi. Carlos
queria verme por lo visto, asi que la insistia convendiendola. Sabia que en su
cronograma de rituales y estructuras, hacer esto era inconsiderable. Y
conociendola, dudo que me pase mucho tiempo sin pañales, esto solo prolongaba
lo inevitable. Pero por hoy esta bien, solo esperaba que la nalgueada no fuera
tan fuerte.
- Bueno bebe, venga aqui. Vamos a curar esa boquita suya.
Sali del rincon, muerta de nervios, miedo y verguenza.
Aunque verguenza no tanto. Carlos es, ademas, el encargado de fabricar todos
mis instrumentos de tortura. Igual, nunca deja de darme verguenza saber que me
van a ver llorando y pataleando por un castigo.
Caminando titubeante hacia ella, que ya estaba con un
cepillo al lado suyo, pero como siempre, obediente aunque no quiera serlo.
- Mami... me vas a... dar mis chas chas frente a ellos?
- Si bebe, necesitan saber por que sos una angelita. Y eso
es por que te tengo bien cortita.
Me ayudo a recostarme, y por suerte estaba justo ahi mi oso,
el cual abraze para que me ayude a soportar el castigo el cual prometia ser
largo y dolorosisimo. Se tomo su tiempo, para acomodarse ella tambien en el
sillon, y apuntando al centro de mi cola, empezo la sonora nalgueada con su
mano. "ow...ay...ow..." gemi lvemente, intentando no llamar demasiado
la atencion por la verguenza de que vieran mi castigo. Eso no demoro demasiado
tiempo, rapidamente empeze menear mi cadera por el ardor. Al principio,
escuchaba, como ellos 2, preparaban la comida, y hacian comentarios acerca de
mis "grititos" lo cual me hacia morirme de la verguenza.
Pero rapidamente, su mano comenzo a caer mas fuerte, y
comenze a patalear, y abrazar mi oso muy fuerte. Escuche al principio el
"awww" pero rapidamente deje de escucharlos y solo podia concentrarme
en el ardor, y en mi cansancio por patalear. Lentamente, comento a desabotonar
mi pijama. Tape mi cola y exclame: NO! Mami porfa, me estan viendo.
- Creiste que te habias salvado?
- Pero...
- Sin peros señorita. Te habras salvado de tu pañal, pero no
de una buena nalgueada. Y vas a recibir otra antes de irte a dormir, asi
aprendes. - Dijo, y comenzo a nalguearme en mi cola desnuda. Esta vez, la
nalgueada comenzo bien fuerte, haciendo temblar mi cola como gelatina. Continue
gimiendo levemente, por timidez, e intentando no hacer tanto escandalo. Empece
a lagrimear lentamente tambien y solo queria que la nalgueada termine
rapidamente. Pero tomo el cepillo y luego de decir: "nunca habia probado
esto en ti" comenzo a azotarme. Rapidamente, empeze a sollozar y a
patalear abrazando mi oso y poniendo la cara contra el sofa. La nalgueada, fue
lenta, pero el cepillo ardia mucho, y mi cola ya estaba al rojo vivo. Creo que
me tubo asi 2 minutos hasta que me solto, y yo salte en el lugar tomando mi
cola con ambas manos y llorando.- Duele, duele duele!!
- Bien merecido lo tiene.- Dijo, y me tomo de la oreja.
- Owwww-
Me llevo a la silla del comedor, obligandome a sentarme en
mi colita desnuda y me alcanzo un cuaderno y un lapiz.
- 100 veces, "No debo berrinchear, mi mami hace las
cosas por mi bien"
- Si... Ayyyyy, ... si mami... owww..- Proteste mientras
intentaba sobarme aun sentada. Sentia mi cola hirbiendo de vuelta. Asustada, y
aun llorando, comence a escribir las lineas, sabiendo que mi cola hinchada no
iba a evitar que mi mama me nalguee de vuelta si no me veia escribiendo.
Cuando iba por la linea 20, me tranquilize un poco, dejando
de llorar tanto. Empece a sentirme conciente de mis alrededores. Primera vez
que estaba castigada escribiendo lineas en una casa que no fuera la mia. Apoye
una mano en mi mejilla y suspire. Luego senti que me revolvia el cabello
alguien. Mire de reojo y era el carpintero: Vamos que no es tan grave.
- Gracias... por salvarme.
- No te preocupes.- Dijo el.
- No te salvaste de nada, terminas tus lineas y esperas en
el rincon a que terminen la comida.
- Si mami....-
- Y respondes como niña buena.
- Si mami!- Respondi mas asustada. Y continue mis lineas.
Mientras tanto, los escuchaba conversar.
- Carlos, este cepillo es muy efectivo.
- Si queres te lo regalo.- se rio el.
- Se nota que es efectivo, la pobrecita lloraba tanto... Me
rompio el corazon te digo.
- Es por su bien. - Explico mi mama. - Pero... puedo
llevarlo en mi cartera, y ella asi aprende a no ser tan irrespetuosa.
- La niña es un angel. Solo esta enojada por el Nanny
patrol.
"Nanny patrol, cierto!!! Hasta borraron mi second
life..." Pense.
- Pero si quieres, puedo hacerte uno. Son facilisimos de
hacer.
- Ay genial. Me lo prestas por ahora. Esta muy despeinada.
- Te puedo prestar unos listones y ebillas que tengo.
- Si , gracias. Asi al menos se ve presentable aunque siga
en pijama.
"listones... Por que tendra listones y ebillas"
Pense. - Ay mami!!... duele...
- Bebe, te estoy peinando, no sigas portandote mal y continua
con tus lineas.-
"ow... Ya era bastante castigo hacerlas con la cola
roja..." pense.
- Y no te muevas tanto. Ya te dije que tenias que ayudar a
mami.
- Perdon mami... ay... - Dije, y me concentre en escribir
las lineas.
- Es un amor esta nena...- Dijo uno de los 2.
- Ya esta lista. - Dijo ella, luego de hacerme 2 coletas,
con listoncitos celestes.
- Aw, que encanto!!- Dijo uno. Me sonroje un poco viendo de
reojo como me festejaban. Que incomodo que lo hagan justo cuando estoy
castigada.
- Sale una foto, se ve re tierna.
- No por fa!!- Dije con mi cara como un tomate.
- Nena, tu sigue con tus lineas.
Continue sonrojada escribiendolas hasta que senti que me
sacaron foto. Se reunieron los 3 a verla.
- Puedo usar la notebook ya para subirla?
- Si, y con el nany patrol vas a ver todas las contraseñas
que use.
"eso es tan injusto..." - ay...- gemi sin querer,
tanto tiempo sentada en esa silla, con mi cola hirbiendo cansaba.
- Ya termine mami...- Dije .
- Muy bien.
- Ya sabes.
- Si...- dije, y me fui al rincon exponiendo mis pompis
rojas y sobandome. Escuche elogios, y supuse que me habian sacado otra foto.
Espere mientras escuchaba que preparaban la mesa. Y senti pasos, y a mi mami,
abotonando mi pijama y tapando mi adolorida colita.
- Ya esta nena. A portarse bien el resto del dia, si?
- Si mami... Perdon. - Respondi, no tan arrepentida, pero
sabiendo lo que me convenia.
- Mami hace estas cosas para protegerte, ahora te sentas y
comes toda tu comida como niña buena.
- Si...- dije, me sente de repente, y gemi: ay... punza...
- Pobrecita nena, queres un almohadoncito? Esas sillas de
madera deben ser muy incomodas.
Mire a mi mama suplicante y ella dijo: Esta bien, traele
uno.
ME sente en el almohadon, y mi mama ato un pañuelo alrededor
de mi cuello.
- Sacale foto, que amor!!
- Otra...? - Pregunte con mi cara aun roja.
- Pero que se vea el almohadoncito. En la descripcion pones
que esta recien castigada.
- Pero...
- Vamos nena. portese bien.- Dijo Mi mama. Cabisbaja, vi de
reojo la camara y me sacaron la foto. Luego continuamos comiendo.
Cuando terminamos, y me quito el pañuelo, Carlos dijo: Tengo
una alfombra, asi puede recostarse en ella. Debe estar muy adolorida. Y libros
para colorear asi no se aburre.
- Yo deberia estudiar no jugar...- Dije. Mi mama me vio mal
y yo suspire: - Lo siento señor... Se que solo es amable conmigo.
- Aqui cerca hay una biblioteca. Y mami dijo que te iba a
comprar tus libros no?
- Si, se lo prometi. Vamos nena, acompañame a la biblioteca
asi compras los libros que queres.
- Pero mami! Sigo en pijama!- Dije. Aunque la solapa estaba
cerrada, se podia ver un poco el rojo de mi cola entre los botones.
- Nadie te va a decir nada.
- Clarita, la nena acaba de recibir un castigo muy fuerte.
Mejor dejala descansar un poquito, mientras vas a comprarle sus libros. Aparte
mira que aplicadita que es, enseguida recordo que debia estudiar.
- Es verdad... Muy bien corazon, busquemos que libros
necesitas.
Luego de Revisar, ella se fue. Me quede sola, con carlos y
su amigo. El chico se fue, y el volvio con una alfombra, para niñas y varios
libros para colorear.
- Una vez cuide de mi sobrinita. Ahora ya es grande y no los
necesita pero vas a poder usarlos tu. - Dijo con dulzura.
Lo vi y dije: Gracias señor...- Era demasiado amable, para
ser el responsable de todos los intrumentos con los que mi mama me castigaba.
Me recoste boca abajo (cosa que se volvio muy normal en mi
ya, no solo por el ardor, sino que por ser pequeña entraba comodamente en la
mayoria de los lugares pensados para gente alta) y tome un libro de colorear.
Desde chiquita que me gusta colorear, y me entretiene mucho. Me daba un poco de
verguenza pensar en que me vea jugar en el piso como una bebe, pero de todas
formas me habia visto en situaciones peores. "Necesito un almohadon..."
Pense. Pero pedir permiso significaba que podian regañarme. Tome mi oso y lo
use de almohadon mejor. Empece a hacerlo tranquilamente, moviendo mis piernas
en el aire, hasta que senti una mano apoyarse en mi cabeza.
- Estamos muy contentos de que hayas vuelto a la casa de
clarita. Tu mama es muy severa , pero te ama y todo lo hace por tu bien. Y como
viste, no es tan mala. Y sos un encanto de nena, nos fascinas. Vas a ver que la
vas a pasar bien.- Se fue luego de decir eso, dejandome coloreando sola.
Al ratito llego mi mama, y dejo los libros al ladomio. Luego
se fueron al taller, seguramente a hacer el cepillo que mi mama queria. Yo
aproveche inmediatamente para ponerme a estudiar. Claro que de vez en cuando,
debia sobarme, el escozor iba a durar un buen tiempo. Capaz todo el dia...
Sentia el dia avanzar, mientras estudiaba. Hasta que escuche
pasos nuevamente.
- Nena, te pararias un poquito por favor? Necesito probar
algo.
- Probar algo?- Pregunte, mientras obedecia inmediatamente.
Ya al lado de ella me tomo de la cintura, y senti rapidamente mi colita herbir.
- AYYYYYY- Dije, sintiendo como rapidamente me soltaba. Me sobe la cola muy
adolorida con ambas manos y proteste: ¿¡ Que hice?!
Es efectivo?- pregunto Roberto.
- Muy efectivo. Casi no hace ruido. Gracias! Bueno bebe,
toma tus cosas, es hora de ir a la casa.
- Si mami...- Dije aun sobandome.
Me llevo de la mano apresuradamente, mientras sentia que la
gente me miraba. Con la cara roja como un tomate, me consolaba diciendo:
"TRanquila, recorda que aqui es normal".
Al llegar a la casa, me quede titubeante mirandola.
- Deja tus cosas bebe, y vamos a tu habitacion. -
- Si mami...- Dije y subimos.
- Nena, te prometi una buena nalgueada antes de dormir no es
asi?
- Si mami...- Dije, y me quede cabisbaja.
- Pero vamos a hacer una prueba a cambio. Asi que te quiero
predispuesta. Esto es por tu educacion y para que yo pueda disciplinarte mejor.
Si ternura?
- Emmm... Si pero... que me va a pasar?
- Quedate tranquilita aqui.
Se fue, y volvio rapidamente con mi paleta y mi cuchara de
madera. Senti mi corazon paralizarse, al verlos y abrace mi oso.
- Tranquila. Carlos me hizo esto, mira.
Era un cepillo rectangular, rosa con letras blancas que
decia Mommys Helper. Era relativamente pequeño para ser un cepillo.
- Lo puedo llevar facilmente en la cartera, y no hace tanto
ruido como nalguearte con mi mano. Aparte pude ver que te dolia mucho. Pero
necesito ver cuanto te duele dependiendo de la tela. Y compararlo con el resto
de mis instrumentos. Asi que primero va a ser con tu pijama.
"bueno... No es tan mal castigo." pense.
- Pero te portas bien, y te dejas nalguear, o te va a ir
peor.
- Si mami.- respondi contenta, sin poder disimularlo. No iba
a sentir esa culpabilidad que siempre sentia.
Me tomo por la cintura, y me dio rapidamente 5 cepillazos.
Menee mi cola y grite, sintiendo mi colita punzar de vuelta.
- Bien, ahora con la vara.- Dijo, soltandome la cintura y
llendo a buscarla.
- Mami, este va a ser mi unico castigo... ay...- Pregunte
mientras me sobaba.
- Si bebe, pero aun no termina.- Dijo ella. Me tomo por la
cintura, y me dio 5 varazos que me hicieron saltar y gritar "AY!" al
mismo tiempo.
- Ya veo...- Dijo. Continue sobandome un poco hasta que tomo
la cuchara de madera.
- Si mami- respondi obedientemente. Esto se sentia consensuado,
y al fin no era la muñeca que ponian boca abajo y nalgueaban hasta que llore.
Esta vez, me hizo patalear levemente. Sintiendo ya el ardor
acumularse, me sobe mas vigorosamente.
- Paleta.- Dijo ella. La vi un poco asustada y me dijo: No
te preocupes, no va a ser tan fuerte.
Aliviada, me incline para que me tome por la cintura.
- Que buena niña - me felicito mi mama. Me dio primero un
paletazo que me hizo saltar y tomar mi cola. - AYYYY!!! - Proteste. Luego me
dio uno mas despacio, que aun asi me hizo gemir, y menearme mucho, pero no
gritar como recien. El ultimo me hizo saltar nuevamente, y agarrar mi cola con
ambas manos.
Parandome en puntas de pies, tomaba mi cola con ambas manos
y pregunte.
- Ya esta?-
- Si, con el pijama ya esta. Ahora probemos con tu vestido.
Luego de cambiarme rapidamente de ropa, con ropa interior
incluida, probo nuevamente con el cepillo, la vara , cuchara y paleta. Eran de
los vestidos largos, que normalmente yo usaba en la ciudad. Al inclinarme, la
tela quedaba pegada a mi piel, por lo tanto mi reaccion fue igual que con mi
pijama. Con la diferencia de que ya estaba adolorida.
- Jardinerito.- Dijo mi mama. Me saco el vestido, y me puso
el jardinerito directamente sobre mi conjunto de camiseta/bombacha de hello
kitty. Me inclino, y yo toque mis rodillas sintiendo el aire fresco acariciar
la parte inferior de mi colita. Me dio el primer azote y pense "No duele
tanto". Aumento un poco la fuerza, hasta que comenzo a arder, pero el jean
amortiguaba mucho el golpe. Sin embargo, uno de los azotes cayo directamente en
la porte que no protegia el jean, haciendo saltar y lanzar un gemido. Me sobe
esa zona, notando que ya le habia quedado una marca arroja, ademas de lo roja
que estaba por los azotes de todo el dia.
- Nunca habia pensado este conjunto. Pero te queda muy
bien.- Dijo mi mama, tomando la vara. - Inclinadita, no te voy a tomar de la
cintura esta vez.
- Si mami. - Respondi obediente, y me incline apoyando las
manos en mis rodillas. Los varazos, me dejaron cierta escozor, hasta que el
ultimo, me lo dio a proposito en una parte donde mi jean no lo protegia. Salte
adolorida. Y prepare la Paleta. Esta vez, no tan segura, me preste nuevamente.
Aun con el jean, los azotes ardian mucho, y el que me dio en mis muslos me dejo
muy adolorida.
- mmmm...- Dijo ella, y me tomo de la mano, recostandome en
sus piernas. Comenzo a nalguearme sonoramente con su mano, haciendome menear en
el lugar. El jean, esta vez, apenas alcanzaba a cubrir mis nalgas. Menee mi
cadera con los azotes, aunque el jean amortiguaba mucho. Tomo el cepillo, y ahi
si comence a patalear. El dolor se acumulaba rapidamente. Probo esta vez con la
cuchara, y esta vez, patalee sin parar. Me nalgueo realmente rapido y me dejo
las nalgas hirbiendo. Patalee tanto, que me acomodo mejor, y estas vez, senti
que asi de inclinada, mi falda se deslizaba hasta la mitad de mi cola. Me paro,
mientras yo intentaba alibiar el fuego con mis 2 manos.
- A ver, el ultimo y ya te ponemos tu pijama y te vas a
dormir. Te estas portando muy bien.-
- Gracias mami... ow...- respondi.
Luego de la monotonia de cambiarme de ropa, esta vez probo
con uno de mis vestidos cortito, de mucho vuelo y mangas aglobadas. Al
inclinarme, el vestido lo sentia tapando apenas la mitad de mi cola. Me nalgueo
con su mano, pero debido al vuelo las nalgadas no dolian tanto. Igual con el
resto de los instrumentos, exceptuando la paleta, y el cepillo, ya que al ser
tan chico, pegaba perfectamente ignorando el vuelo de este. Me puso en otk, y
probo nalguearme varias veces, teniendo masomenos los mismos resultados.
Luego de eso, me puso mi pijama, me festejo por portarme muy
bien, y me llevo a la cama.