La arlequina 4

Vanesa trotaba por el pueblo, intentando escapar de la luz. Lo hacia tranquilamente, y sin miedo, habia pasado una semana desde que fue “alumna” de la directora y que fuera teletransportada a un lugar azaroso. Ese humillante castigo le enseño muchas cosas. Y no precisamente a no dañar la propiedad privada. Ademas de todo lo que aprendio de sus nuevos poderes, tubo tiempo de sobra para pensar y llegar a una conclusión.

“- Existe alguna forma de liberarse de un Artefacto Magico?.

- No. Eso es imposible…” recordaba Vanesa mientras trotaba. Noto que atrajo algunos guardias y troto por la sombra, volviéndose invisible. Eso fue uno de los detalles que aprendio, todos sus poderes requieren determinado esfuerzo, la luz de la luna vuelve a sus ilusiones mas fáciles de realizar y controlar, además de sus teletransportaciones mucho mas agiles. En cambio, las sombras le dan los poderes de la noche, en ella naturalmente se vuelve invisible. Si quiere hacer el esfuerzo de utilizar su magia estelar, las estrellas de su mameluco brillaran delatándola. La luz de la luna directa aumenta mucho sus poderes, y si esta estaba llena tenia magia casi ilimitada.

 “Debe haber alguna forma… de romper este hechizo y volver a mi vida normal”. Penso Vanesa, deshaciéndose de los guardias fácilmente y volviendo a trotar.  “Por ahora sere la Arlequina del reyno…. No estoy segura del todo, pero tengo una misión a cumplir. “ pensó, viendo la estrella en su trasero.

“ – Se cree que cuando se cumpla alguna condición la estrella desaparecerá, permitiendo a la usuaria acceder al pleno poder del mameluco de loki. Hasta ahora solo la primer arlequina lo logro. Pero no hay demasiadas recopilaciones de sus historias. –“ recordó Vanesa.

- La arlequina es la única que puede desafiar al rey. – Penso Vanesa. Recordo que de alguna forma el puede ver sus castigos humillantes cuando el mameluco es desabotonado. “Supongo que debe ser por el vinculo que tiene este traje con el rey, y lo de ser su “arlequina personal”. Pero como podría acercarme si los guardias me persiguen? Mi magia Stellar no puede hacer daño. Lo máximo que puedo es generar la ilusión de daño. “ Penso. Viéndose la cola de vuelta. “En cambio mi magia lunar…”

- Al menos algo que si puedo hacer es trotar!. – Se rio. – Me canso siempre que tengo que correr, eso va a cambiar! – Se animo no demasiado motivada. Nuevamente corrio bajo la luz de luna, sintiendo como la bañaba. Motivandose se repitió: “Las Arlequinas desde la antigüedad eran las únicas que tenían permitido burlarse del rey. A tal punto que incluso, entre sus burlas y bromas, lo alertaban de algún ataque en su contra. ¿Acaso esa es la razon por la vuelva a haber una arlequina en 100 años? “

Sin embargo, habia otro problema. Se esta volviendo loca. La impronta de Loki sobre el traje de arlquin carcomia el cerebro de Vanesa. Luego de haber sido clavada por lanzas, aplastada, cortada en dos, Vanesa se habia vuelto absolutamente temeraria.  Lo único que la atemorizaba era pasar por otro horrible dia de castigo, o recibir un fuerte azote en el trasero. Los pueblerinos se habían ganado su odio luego de dos días de burlas, y sentia un irrefrenable deseo de atormentar a todo lo que tuviera alrededor. A veces debía contenerse, y otras veces, rompia en su deseo, brotando en carcajadas. Cada guardia nuevo, era un nuevo juguete para ella, del cual debía disuadirse de no jugar. Cuando lo hacia, llamaba la atención de todo el pueblo y debía huir nuevamente.

Siendo nuevamente acechadas por guardias, ella se metio a unbosque. Y estos la siguieron.

 - ¿ cuando piensan dejarme en paz? – Protesto.

- Vamos arlequina, ven con nosotros!! Solo queremos llevarte al cepo de vuelta. – Bromearon los guardias, gritando al aire. La oscuridad impedia verla. Vieron un destello azul y a un árbol caer sobre ellos. Alcanzaron a esquivar el tronco mayor, pero las ramas los arojaron al piso. De repente vieron unos llamativos zapatos acercarse, y con ellos la arlequina. Rapidamente se pararon y la atraparon.

 - Eres nuestra. – Exclamo uno de ellos, y vieron el traje de la arlequina cambiar a un gris oscuro. Las estrellas y corazones desaparecieron, y en su lugar, las lunas menguantes brillaron con un fuerte color azulado. De repente, muchas lunas menguantes salieron de ella, al compañero del guardia, lo cortaron en pedazos. El otro se desespero, revoliando muchos espadazos a la nada, las lunas chocaron contra ellos rebotando hasta sufrir el mismo destino que su compañero. En los ataques a la nada, uno corto la mejilla de la Arlequina, haciéndola perder sangre. Ella sin embargo continuaba seria. Las ganas de hacer travesuras era una cosa, las ganas de deshacerse de alguien era otras. A veces, se arrepentia de haber estado en esa clase y aprender eso.

- Si haces eso puedes ser lastimada normalmente ¿no? – escucho decir.

- Tu!!- Dijo Vanesa volviendo a la normalidad. Se dio cuenta que se habia vuelto invisible al hacerlo, y por eso hizo que sus estrellas brillen. Era la única forma de ser vista, y también, de poder usar su magia Estelar. – Por tu culpa estuve todo un dia escribiendo líneas con 2mil alumnos burlándose de mi!! Sabes lo que es eso??? Si estubieramos en el claro de luna te transformaría en un bebe gigante.

- Tranquila… Tranquila…. Nosotras estuvimos a punto de salvarte, tu fuiste la tonta que no aprovecho para teletransportarse y fue capturada de vuelta..- Contesto Neva indiferente.

- ¿ Que haces por aca?- Protesto Vanesa tomando su mejilla sangrante.

- Venia a darte tu paga. Cumplimos la misión. Hey…. Te vas a desangrar y no creo que ningún mago blanco te cure. Veni a casa, tengo un botiquín. -

Vanesa con un gesto sombrio vio al piso a los dos guardias y neva bromeo: ¿primera vez que matas a alguien no? Tienen tiempo hasta el rigor mortis para revivirlos… aunque va a ser muy asqueroso. Ah, mira, ya lo teletransportaron… De seguro los mandaron vigilados. Te están persiguiendo.

- Ya lo se… soy la Arlequina. Creo que el rey puso orden de captura.

- Vas a vivir con orden de captura, sos el juguete del rey.

- O viceversa…- Penso ella decidida.

Vanesa golpeo el aire hasta rebotar con algo, de ahí salieron grietas violáceas y de vuelta, otro portal.

Calleron del otro lado, en un lugar que parecía un basurero, pero era una casa. Palabras no alcanzarían para describir lo sucio y asqueroso que estaba el lugar.  Observando por la ventana, Vanesa noto que estaban en un conventillo. Mirando el piso pensó : Con tanta mugre no tendrán cucarachas?

- Ah, no ,tenemos gato..- Dijo, tomando un porro de la mesa. – Vacan!! – Exclamo y un gato blanco y anaranjado apareció. Tenia una aparencia roñosa, y estaba cubierto en cicatrices, además de que era sencillamente gigante. Miro a neva esperando a que le de una noticia interesante y luego de eso se fue caminando indiferente.

- ¿ no vas a saludar en forma humana, desubicado? – Pregunto neva. El gato se transformo en un gordo aranajado, y dijo: Hola…- enseguida tomo una botella de whisky, de las tantas que habia en la mesa y se fue.

- Te estuvo buscando el gato pardo. – Contesto neva.

- Ya lo cague a palo tres veces y quiere mas?- Contesto a lo lejos.

- Por aca debe estar el botiquín, ven aquí Arlequina. – Dijo Neva, y justo entro whisp, en su traje de maid. Se paro frente al espejo, se hizo una cola de caballo, se puso su cofia y comenzó a acomodarse el moño frente al espejo y a ponerse el delantal.

- Che Whisp…. Ya que terminaste de ponerte tu trajecito, no limpias un poco? La casa esta un asco.-

Whisp volteo, y le mostro su dedo mayor. Al hacerlo una ráfaga de viento envolvio el cuarto tirando toda la mugre y la basura por la ventana.

- Wow…- Se sorprendio Vanesa. Whisp, apresurada, hizo una bola de viento en su mano de la cual salio una gran escoba, se subio a ella, y otra ráfaga de viento la hizo volar por la ventana.

- Sigo pensando que un dragon de viento es un desperdicio de dragon. – Bromeo la arlequina.

- No se lo digas o se pone insoportable… Esta histérica por que tiene que trabajar de noche... Pero al menos limpia la casa. Por eso la llamo siempre. ¿Queres vivir aca conmigo?-

- Y eso tan de improvisto?- Se pregunto Vanesa.

- Estas viviendo en la calle y me da lastima.

- ¿yo te doy lastima? Mira este chiquero… - contesto la Arlequina, - Perdon, encima que me ofreces lugar donde quedarme…

- Creo que ya me pediste disculpas 3 veces. Me siento afortunada.

El autor solo hablo hasta ahora de la altura y las ojeras de neva. Pero no hizo incapie en lo obsesiva que era ella con su apariencia, lo cuidadas que estaban sus colitas y lo bello que era su vestido. Esto habia sorprendido a la arlequina en comparación a lo asquerosa que era su casa.

- Es medio extraño todo esto…- Comento Vanesa: - Desde que soy Arlequina me estas siguiendo. Tu extraño trabajo con el que pedias ayuda, me transporto a la biblioteca de una vieja loca, obsecionada con educar arlequinas, y que decia ser la directora. Y en mi castigo aprendi demasiadas cosas utiles, para ser un castigo. ¿ No se supone que transportabas algo?

- Te transporte a ti a esa biblioteca. – Confeso.

- Sabia que tramabas algo raro!

- Pero quería saber por que hasta que la vi desabotonándote. Y cuando lo hizo, re- apareci aca. Whisp no recordara nada. Solo las demonios tenemos memoria exacta de lo que sucede entre dimensiones.-

- Si algo asi explica… Me engañaste, lo sabia!!

- Tu misma dijiste que aprendiste cosas y misterios sobre tu traje…. Y encima te estoy dando parte de la paga y lugar donde dormir. Y encima te quejas?

La Arlequina pensó en pedir disculpas, pero recordó la famosa frase y se cruzo de brazos.

- Siempre que hago transportes tengo algún tipo de problemas…. Con esto de la magia blanca todo es muy peligroso, y a nadie le da miedo morirse total es revivido a los días. No se si pasaba lo mismo donde vivias.

- Yo vivía en el campo… - Suspiro la arlequina.

- Suelo pedirle ayuda a Whips cuando es muy complicado. Pero la hicieron trabajar de noche, ¡te pagare bien si me acompañas!

- ¿Quién te contrato?

- No lo se, llego una carta con dinero y una orden. Cuando te entregue llego otra con mas dinero. – explico. – Quiza si tengas pistas si me ayudas.

- No hay ninguna pista mas que tener. Es imposible quitárselo. – Suspiro la arlequina apoyando la cara en sus muñecas. – Capaz si supero el camino de la estrella lo pueda quitar, pero n idea cual es la condición.

- Camino de la estrella?

- Larga historia. …. Hay una cama libre por aca? Donde esta mi dinero?