Esa noche y el resto de la semana fueron
relativamente normales. El martes vinieron visitas, asi que otra vez anduve con
el vestido rosa. Pero bueno, solo fueron preguntas, y quedarme quieta sin decir
ni pio. Asi que no fue tan grave como la ultima vez. Y era solo una señora en
esta ocasión, no un gordo libidinoso con su sumisa. El señor X no estaba, pero
hablo con Pau. Y suongo que debo estar presentable para las visitas. Bleh.
Estuvo un par de horas y se fue. Me cayo bien…. Pero odie que me apretara las
mejillas… Y bueno… hice un berrinche, y bueno, al menos el castigo fue a la
noche, y no cuando estaba ella. Creo que Pau es dentro de todo as buena.
El miércoles tuve mis clases normales de
siempre. Parece que cuando no hay visitas me la paso en uniforme. Pero luego
del almuerzo, me tomo de la mano, y me llevo a mi habitación. Me mostro una
caja, y vacio el armario. Hizo una pila de ropa en un rincón, y me ordeno
desnudarme. Debe gustarle mucho a pau que este desnuda. Siempre suele hacerlo.
Pero hoy no estaba tan elaborada, asi que hice caso.
-
Ya llego tu ropa, asi que toda la demás la vamos
a guardar. Creo que solo vas a conservar el vestido rojo y rosa. Y además, tus
uniformes.
Ella los tomo y los puso en esa caja.
-
Igual quiero lavarlos, ya los usaste demasiado y
vas a descansar de ellos por un tiempo.
Habia otra caja muy grande cerca. Luego me
mostro mi bolso.
-
Esta ropa, la vamos a tener nosotros. Si te
portas muy bien durante toda la semana, te vamos a dejar usar una prenda para
cuando salgas. Mientras este va a ser tu nuevo vestuario.- explico palmeando la
caja grande.
Cuanto suspenso que quiere imponer, creo
que a ella le entusiasma mil veces mas que a mi. Cierto lado infantil en mi,
esta comenzando a disfrutar tanta ropa de nena, pero yo … yo no. Pero bueno,
una mancha mas al tigre. Cuando abrió la caja, primero saco muchas bombachas y
camisetas con motivos infantiles. Lo típico, ositos, conejitos, eso. Y los
guardo todos en el primer cajón.
-
Esa va a ser tu ropa interior nena. Ya sos
grande, y a veces te vamos a dejar cambiarte sola. –
Luego saco varios vestidos sin mangas. Uno
era de marinerita, otro era normal, solo con mariposas y celeste, y otro era
rosa.
No eran tan aniñados como los otros. Saco varias playeras también, una de
hello kitty, y un par mas, con dibujos, quizá con rayas, o blusas ccon volados.
Todas un poco aniñadas y no tan insoportablemente infantiles. Luego una falda
con tirantes rosa y un jardinerito de jean.
-
Y esta mi niña, va a ser tu ropa normal. Auun es
verano, cuando sea otoño o invierno, vas a usar algo mas abrigado.-
La verdad no me llamo tanto la atención. Es
incluso menos infantil que la que tenia que usar “normalmente”. Asi que me
pareció un alivio. Hasta los vestidos, si bien tontos, se veian muy comodos.
-
Te vamos a dejar elegirla durante la semana.
Pero… Va a ser tu única ropa.-
Suele ser mi única ropa.
-
Y vas a usarla afuera también.-
-
EH?-
Ahí si que me dio vergüenza.
-
Sos nuestra hija 24/7.- Explico ,y comenzó a
guardarla en los cajones.
-
Pero… Es muy ridícula para salir asi a la
calle!!!
-
Pasaria por ropa normal, y te quedaría muy bien.
-
No pienso…
-
No saldrás a la calle entonces. Vamos a empezar
a ser un poquito mas permisivos, si seguís nuestras reglas. Esta ciudad es
linda, y vas a poder recorrerla un poco conmigo si queres.
-
Pero… entonces voy a llevarla a la facultad?
-
Naturalmente.
-
Voy a verme como una tarada!
Pau me miro frunciendo el seño nuevamente.
Y luego comenzó a sacar vestidos como el rosa. La mayoría eran muy cortos e
infantiles, uno amarillo, otro con ositos, uno con un delantal de
conejitos…..aHHHHHHHH que asco. Y también otro de marinerita. Note que todos
también se abotonaban por atrás, y tenían botones muy chicos. Y entre ellos
había un jardinerito rosa, con ositos en la pechera.
-
Esta es la ropa que vas a usar para las visitas
o cuando tu papa lo desee.
-
ESA? Es un….
-
Un que?
-
Un…..
-
Mejor. Cuando el la ordene te la voy a poner, y
vas a usarla hasta que te la saque.
-
ASCO!
-
…..
Pau comenzó a guardar la ropa,
colgándola prolijamente. Y luego me tomo, para darme otra nalgueada, djandome
muy adolorida.
-
Ah, supongo que ya te imaginas que somos muy
raros no?
-
Si… me di cuenta.
Ahí pau hizo una sonrisa de oreja a oreja.
Y del cajón, saco unas bombachas muy ridículas, de distintos colores, con
pequeños volados , un dibujito (de oso, conejo, cosas tontas asi) y el dia de
la semana en la cola.
-
Eso….
-
Son tus bombachas semanales! Bueno, a mi señor
le gusta la buena vista y…
-
Puaj…
-
Y vas a usarlas mientras estes castigada.
-
Pero…
-
Cuando estes castigada las vas a usar junto a tu
cola roja. Y también si vemos que andas teniendo problemas de higiene. No podemos
bañarte y vestirte todos los días nena, en poco tiempo vas a empezar la
facultad. Cuando te den la orden de usarlas, las vas a usar correctamente.
-
PERO SI ME VEN…
-
Se van a dar cuenta de que te portaste muy mal
…- Dijo sonriéndose.- Y ahora a usar la que diga miércoles.
La mire con odio, pero mi cola seguía
adolorida, asi que tome la que decía miércoles y me la puse. Luego una camiseta
violeta estampada con mariposas.
-
Me siento tan tonta….
Del cajón saco también unas pantuflas, y
ojotas.
-
Para que no estes tan incomoda todo el dia.
Bueno, eso si me gusto. Ademas había
zapatillas, obviamente infantiles, y medias. Pero no estaban tan mal.
-
Bueno, podes ir eligiendo tu ropa. Tu pelo lo
vas a tener atado, en dos coletas. Siempre. Salvo que quieras que te peine yo
esta claro?
-
Seh….
Me acerque a buscar la remera de hello
kitty, y el jardinerito. Que se veian un poco normales y no tan ridículos. Pero
luego recordé que esta ropa iba a tener que usarla si o si. Y seguro no me
dejaban repetirla. El fin de semana quería salir, y un jardinerito con remera
de hello kitty no se veria taaaaaaaaaaan mal. Tome uno de los vestidos sin
mangas. Y bueno, al ponérmelo descubri que si era comodo, y tan mal no me
quedaba.
Y luego vi en el fondo de la caja esa, un
uniforme de maid de mi medida.
-
Eh, y eso?
-
Ah… Si en algún momento llegas a debernos algo
de dinero… asi lo vas a pagar – Dijo Pau riéndose. – Pero no te preocupes, no
es nada grave.
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