Saint francis (spin off) cap 4 junto a aclaraciones del autor (un capino espinoso)

A diferencia de mis otras historias esta tiene algo que normalmente evito y es mucho contenido religioso. Esto puede espantar a la mayoria ya que... bueno, se que es un tema profundo y que da para mas. En lo personal soy agnostico y demasiado... ummm...  ¿objetivo e insensible? Y no le veo el peso que debe tener para los demas. Claro, para los demas debo blasfemar como... bue... en esta historia.

Sepan comprender las razones de por que incluir algo tan tabu como la religion en una historia de spank: No existe otra institucion tan obsesivamente estricta y severa como las instituciones religiosas. La otra posiblemente sean las militares. Y millones de adolescentes e incluso adultos reales han bailado al ritmo de la vara por eso. De ahi es que quiero meter contenido que evoque esa rigidez aunque a mi personalmente no me inspire la misma espiritualidad. Esto puede generar baches en la historia, los mismos baches que generaria si yo hablara de Basquet sin nunca haberlo jugado... Pero bueno, sirve para el proposito. Ahora si, Disfruten.

Cap 4.

Ortiz sonrio de oreja, viendo como “Sus niñas” la seguían obedientemente, y respondían “Si Madre Ortiz” a cada una de sus explicaciones. Empezo a sentir una satisfacción que nunca antes había sentido. Era difícil no verlas como niñas vestidas asi y tan dependientes de ella. Sentia que lo único que necesitaban era algo de mano dura y cariño. Lastima Stella, que con su régimen militar solo las molestaba.

Camino con la fila de alumnas a la entrada principal, la cual daba directamente a un amplio salón, con 3 puertas y un amplio cartel que decia “purgatorio”.

- Este es ….- intento Ortiz explicar con dulzura hasta que Stella la interrumpio.

- el purgatoria. Jovencitas cuyos listones hayan sido retirados deberán presentarse puntualmente a las 6 para un castigo ejemplar. Quienes no lo hagan serán llevadas a la fuerza y sus puntos se borraran completamente.

- A Jessica solo le queda unoooo…- Bromeo Amy.

- Amy Hastur. Llamas o arrepentimiento.

- M…..-

20 azotes después, Amy caminaba sobándose con ambas manos de vuelta mientras Mariela la espiaba embobada.

- Esta muy roja… por que dijiste eso?

- queres callarte?

- Niñas no peleen.- Ordeno Ortiz

- Lo sentimos…- Respondieron ambas al unisono.

“Era solo una broma… no debio castigarla. “ Pensaba Ortiz. “Y de todas formas, Jessica necesita entender el error que cometio al no aceptar el castigo y perder un liston.”

Finalmente visitaron la biblioteca, la sala de ocio y al final comieron todas juntas en el comedor. Luego de eso las llevaron al aula.

Las chicas entraron de una, y se sentaron al frente de la clase, con las gemelas y jessica adelante, y rhonda, Mariela y Alice detrás. Mariela eligio deliberadamente el asiento justo detrás de las gemelas.

Hasta las chicas que no habían sido nalgueadas encontraban dificultades para sentarse esos incomodos asientos unidos al pupitre. Mariela intento subirse a el, y al hacerlo, descubrió que el asiento prácticamente la obligaba a inclinarse sobre el pupitre para poder estar comoda, y que solo podia sentarse en sus muslos exhibiendo el resto de su cola. Habia espacio suficiente entre cada banco, y los rincones del aula estaban pintados de rojo, con sus respectivos banquitos.

“Mierda…. Se me pega la madera en los muslos y aun me duelen…” Protesto Mariela para sus adentros y cuando vio hacia adelante noto que las gemelas tenían los mismos problemas. En especial Amy quien fue nalgueada dos veces. Mariela quedo embobada nuevamente, la sensación, el hormigueo y la coloración en sus mejillas se intensifico aun mas. Aunque ella sentía lo mismo verla en ellas era… E incluso, el jumper no alcanzaba a tapar toda la cola de las chicas, asi que alcanzaba a ver sus colas rojas, el calzon blanco y parte del dia a perfeccion. Normalmente le daría vergüenza pensar que su situación era igual. Pero no le importaba!! En este momento no.

- Se les…- Intento decir Stella, pero Ortiz, en venganza la interrumpio.

- Bueno chicas. Necesitamos hacerles una evaluación. No tengan miedo y contesten todo lo que sepan. Asi determinaremos quien necesita mas ayuda. Ustedes asistirán al instituto saint francis cuando termine el verano, y tiene un nivel muy exigente. Necesitamos enseñarles hasta que todas tengan el mismo nivel. ¿Alguna pregunta?

- No tienen asientos mas incomodos…?- Contesto irónicamente Annie. Todas se rieron hasta que Annie se tapo la boca.

- Queres un asiento mas incomodo?- Pregunto Ortiz.

- P-Perdon, no lo vuelvo a hacer, se me escapo!!- Suplico Annie.

- De pie. –

La chica obedecio asustada, pero continuo suplicando.

- Perdon no lo…

- Apoya los coditos en la mesa.

Lo hizo y rápidamente la nalgueo en los muslos varias veces con la mano mientras ella pataleaba.

- Sentate.

LA chica se sento y sintió sus muslos adoloridos pegarse a la madera.

- Ayyyyyy….- Protesto en voz alta.

- Necesitas que sean mas comodos?-

- Noooo…- Protesto.

Cuando se alejo, annie miro a su hermana y se rio tapándose la boca.

Stella miro a Ortiz enojada y ambas notaron que Alice levanto la mano.

- Diga señorita Kant.

- Nos dara puntos por terminar bien el examen? –

Nuevamente Ortiz interrumpio.

- Este examen es solo para evaluarlas. No recibirán puntos ni serán castigadas.

Las gemelas y Mariela suspiraron aliviadas.

- Se pretende absoluto silencio mientras dan su examen- advirtió stella. – Chica que sea descubierta copiándose se le retiraran sus listones para un castigo ejemplar en el purgatorio. Esta claro?

- Si…. Madre Stella…- Dijeron todas al unisono.

Se instalo un aire lúgubre luego de eso, mientras se les entrego lápiz y el examen junto a varias hojas.

- Son 100 preguntas, multiple choice. Deberan responder todas. Las que tengan ejercicios matemáticos se deberán responder junto al correspondiente ejercicio. En caso de que no sepan, pondrá en mayúscula “NO SE” al lado. Se espera suma prolijidad, serán castigadas caso contrario. Comienzen. - Ordeno Stella.

El largo examen comenzó y las chicas empezaron a resolver rápidamente el examen. A pesar de que les dijeron que no serian castigadas, todas suponían que un buen desempeño era mucho mejor que uno bueno. Y con lo aterrador que resultaba ser este lugar, lo ultimo que querían era un mal desempeño.

Stella caminaba en silencio, vara en mano, entre las alumnas. Ortiz se tomo la cabeza indignada al ver eso. “Se veria mejor en una prisión que aca.” Protesto. Apenas una chica quitaba los ojos del examen, le apoyaba la vara correctiva en la cola y la amenazaba. – Concentrese en su examen. –

Quienes mas recibían este trato eran las gemelas. Annie estaba tan nerviosa que no dejaba de ver a su hermana quien suele brindarle contención en esos momentos. Amy se veía inquieta, se frustraba mucho intentando encontrar una respuesta. Regularmente, ambas recibían un azote, lo cual hacia que además, estén adoloridas. Mariela al ver eso, sentía su imaginación fluir cual manantial. Se moria de ganas de dibujarlas o escribir sobre ellas, y le costaba horrores concentrarse.

Stella levanto su mano, y Stella le dio permiso de hablar.

- Ya termine, ¿puedo entregarlo?

- Muy bien. Esa es la actitud que debes tener. 10 puntos para ti.

- Muchas gracias Madre Stella.

- Si, entrégalo y luego de eso puedes relajarte el resto del dia. Recuerda, a las 21 hs es la cena. A las 22 hs es inspección de uniformes en sus habitaciones. Se pretende que todas estén en sus habitaciones y con sus camisones puestos.

- Si Madre Stella.- Dijo ella y se retiro.

- Quienes quieran entregar el examen y retirarse pueden hacerlo. Recuerden lo que dijo Madre Stella. Se les dara sus asignaciones mañana. –

De a poco, todas entregaron los exámenes y finalmente se retiraron. Quien mas se tardo fue Mariela obviamente.

Saint Francis (Spin off) cap 3

- Por que te tardaste tanto?

- Uffff…. Jessica me dio muchos problemas.

- Me di cuenta, hubieras dejado.

- Necesita respetarme. Apenas salio Rhonda del vestidor, empezó a burlarse. Cuando la obligue a entrar, y le di la orden de desnudarse me desafio. Le dije que si no lo hacia, debería desnudarla yo y me dijo: “Y vos enana crees que podrias obligarme?”. Entonces le di un fuerte tiron de oreja hacia la silla. Ella intento pegarme, pero le doble el brazo como nos pegaron, con mi peso, me tire hacia la silla y la hice perder el equilibrio, haciéndola caer en mis piernas. Luego use las técnicas que nos enseñaron, trabe sus piernas, sus brazos, puse su trasero desnudo, y le di una larga nalgueada. Cuando lloraba suplicando que pare, finalmente lo hice, la desnude y la vesti como hiciste con Kant. – Presumio Ortiz orgullosa. – Necesitaba darle una buena lección, sino nunca me respetaría. Ahora anda enseñando sus nalgas rojas a sus compañeras. – Se burlo Ortiz. Stella continuo con sus sospechas acerca de ella, pero ella se sintió triunfante.

Ortiz no mintió en su relato, realmente lo logro. Ella y Jessica debían medir lo mismo, pero por su rostro angelical, y complexión corporal, Ortiz se ve mas pequeña de lo que es. En ese momento Ortiz agradeció las horas de hacer pesas (que no comprendia por que ella quería ser maestra, no físico culturista), de practicar como inmovilizar en otk con sus compañeras y las veces que la inmovilizaron a ella OTK. Ejercisios en los cuales debía resistirse con todas sus fuerzas, y aprendia a tener la empatía suficiente como para predecir que movimientos haría la alumna para poder escapar. Hasta agradeció los castigos que recibió en carne propia y que la hicieron comprender la desesperación que sentío cintio ante el dolor. Fue difícil poner rojo ese gran y carnoso trasero, pero lo logro, y ahora seguramente debía estar aun sobándose.

Lo que no conto Ortiz, es que apenas tubo a la chica sobre sus piernas, inmovilizada y le dio su primer nalgada, ella repentinamente sintió una ola de adrenalina en su cuerpo que no había sentido nunca. Hacerla patalear, y suplicar que su castigo termine, fue una sensación que no imagino que iba a ser asi. Y quedaron grabadas en su retina, las imágenes de como obligaba a Jessica a desnudarse, y a vestirla. Y su rostro de humillación luego de haber sido nalgueada y obligada a cambiarse al uniforme de saint francis. En ese momento deseo poder humillarla mas, pero lamentablemente ya todas estaban lejos. Solo estaba Lind frente a la cual dijo: Ya esta, cambiada a su uniforme y con sus nalgas calentitas. Pero Lind ni siquiera reacciono. Estas imágenes se repetían una y otra vez en su cerebro, mientras presumia orgullosa su hazaña de vuelta, sin que Stella se lo haya pedido.

Mientras llegaban escucharon chicas pelear. Stella abrió rápidamente la puerta y enseguida les grito la orden.

Ante la orden, Amy que si había leído el folleto inmediatamente estiro sus piernas dando la espalda a las monjas, y apoyo sus manos en sus rodillas. Annie y Amy por ser gemelas tienen una conexión empatica, no debio haber pasado ni un segundo y Annie ya estaba imitando la posición de su hermana. Alice, sin embargo solo marcho al rincón y se arrodillo en un banquito. Pronto las chicas escucharon oraciones en voz baja, y la vieron apoyar sus brazos en una incomoda posición. Jessica dedujo que debía elegir un castigo como sus compañeras. Pero por que?Que hizo?Por pelear fue?Y hacer algo tan humillante?

- Pasaron 10 segundos. – Dijo Stella y le saco un liston. Luego de eso, Ortiz y ella se pararon al lado de las gemelas. Naturalmente una se veía mucho mas nerviosa que la otra y hasta sus piernitas temblaban. El jumper en esa posición no tapaba su trasero del todo, o mas bien tapaba la mitad. Pero sin embargo, ambas tomaron la decisión de levantarselo al mismo tiempo. La razón era simple, sus colas eran muy pequeñas, era difícil distinguir la unicacion del hueso de la cadera a simple vista. Desde su posición, Mariela estaba punto de presenciar un castigo por primera vez. Habia sentido muchos, pero nunca presenciado uno. Empezo sintiendo indignación, mucha… pero…

PAF!!!

Mariela observo como las monjas, dieron el primer azote a la cola de las gemelas, con una vara correctiva. Apenas alcanzaba a ver, que ambas varas llevaban un verso de la biblia inscripto en ellas. Las chicas al sentir el primer azote, saltaron y tomaron sus colas al unisono.

- AYYYYY ESO DUELE MUCHO- Gritaron ambas al mismo tiempo.

- Chicas vuelven a su posición ya mismo. –

Mariela pudo ver perfectamente como ambas, llenas de vergüenza y coraje volvían a su posición. Distinguio (gracias a sus calzones) que quien estaba nerviosa, muerta de miedo y con voz llorosa era Annie. En cambio a Amy, alcanzaba a ver entre sus piernas, su rostro lleno de enojo, su cara roja, y como apretaba los dientes esperando el próximo azote mientras sus trenzas colgaban hasta el piso. Ambas colitas, al mismo tiempo, empezaron a mostrar una marca de irritación que el calzon de algodón apenas alcanzaba a tapar, a pesar de sus dimensiones.

Ortiz sintió que la reacción de las niñas fue exagerada en cuanto al azote. El primero le informaron que debía ser fuerte, para llamar la atención de las jovencitas. Pero la sorprendio mucho la reacción y debía si o si darles 20, ahora que eligieron llamas. Luego de haber tenido que usar toda su fuerza para someterla a Jessica, darle una buena lección y cambiarla al uniforme reglamentario, ahora parecía que iba a tener que regular mucho su fuerza si no quería lastimarla. A su vez, empezó a sentir que el instrumento de madera le sobraba. Las gemelas eran como dos muñecas, seria muchísimo mas fácil que cada una alzara una gemela y la nalgueara en sus piernas como las niñas que son. Pero la directora es muy estructurada y solo le permite castigarlas de esa manera. Apoyo su mano en la espalda de la jovencita, y noto su respiración agitada y como la chica temblaba. Leyo en su calzon que la que le toco era Annie. Stella, luego de eso, empezó a darle rapidos y cortos azotes con la vara a Amy, quien se retorcia del dolor y gemia. Al instante que Stella lo hizo, ella hizo lo mismo, y enseguida noto que su niña comenzó a llorar desconsoladamente. La sensación fue extraña, le dio tristeza, pero no podía dar un castigo menos fuerte que su compañera, debían castigarlas a todas por igual. Sin embargo, verla llorar, verlas intentar mantener su posición a pesar del dolor y el coraje, y luego, verlas a ambas dar otro salto, tomar sus nalgas, y llorar al unisono: “Perdon, no lo volvemos a hacer!!” hizo que otra vez sintiera una ola de adrenalina.

- Si no se quedan quietas, empezaremos de vuelta!!

- P-Perdon…- Dijeron ambas, y débilmente volvieron a su posición. Ortiz sonrio por dentro, y calculando mejor la fuerza, comenzó a tostar la cola de la chica que le toco castigar. “Parece que están acostumbradas a ser castigadas juntas… reaccionan igual y al mismo tiempo” Penso.

Repartio las nalgadas por toda la cola, exceptuando los muslos, hasta que al final le dio el máximo de 5 permitidos en ellos. Annie sollozo y se retorcio del dolor al sentirlos, y cuando las soltaron, ambas dieron varios saltos en su lugar tomando sus traseros, hasta que finalmente Annie abrazo a Amy y lloro en su pecho.

- Dueleeeeeee…- Sollozo Annie.

- Ahora no llores todo el dia…- Protesto Amy, abrazándola contra su pecho y mimando su espalda.

- Chicas, paradas las 3 , una al lado de la otra. Kant, tu escucha lo que dire desde el rincón.

Las gemelas obedecieron. Annie, continuaba sobando sus ojos con una mano mientras que con la otra sobaba su cola. Amy, sobaba su cola con ambas manos, tenia sus ojos llenos de lagrimas, pero intentaba no llorar, y la cara roja del coraje. Jessica se encontraba confundida, y no sabia por que no la habían castigado.

- No pienso permitir que aca se peleen. Esperen mucho mas castigos en caso de que esta actitud continue. Van a vivir juntas, asi que deberán convivir en paz. Y voy a repetir estos castigos hasta que finalmente lo hagan. Entendieron?

- S-Si madre Stella….- Dijeron Annie y Amy al unisono. Annie bajo su cabeza arrepentida mientras que Amy desvio la mirada molesta.

- Las chicas en el rincón también deben responder.

- Si Madre Stella.- Dijo Alice poniéndose de pie, y uniéndose al resto de las chicas. Sus rodillas qudaron rosadas luego de tanto tiempo arrodillada. La mirada se fijo en Jessica y Stella amenazo.

- Cintio, ya perdiste tu liston, queres perder el otro?

Amy la miro a Cintio y negó varias veces con su cabeza. Cintio resignada respondio: No Madre stella. Perdon.

- Muy bien. Todas vengan aquí, las quiero en grupos de 3.

Las gemelas y Kant ya estaban en un grupo de 3, por ende las restantes solo se pararon detrás de ellas.

- Comenzaremos por aclarar algunos temas que necesitaran tener en cuenta si quieren salvar sus traseros. – Dijo Ortiz bromeando.

 “Que dice…” Penso Stella y ella continuo.

- Se pretende que todos sus uniformes se usen de forma impecable. El uso incorrecto de uniforme es motivo de castigo. Tambien lo es la falta de higiene, y de orden personal. Cada alumna deberá lavar diariamente sus calzones y usar el correspondiente. La próxima semana se les dara otra muda de uniformes, por lo cual deberán lavar los que usaron la anterior semana. Repito, la falta de higiene es motivo de castigo y la chequeare constantemente. Las habitaciones serán limpiadas por ustedes. Si no esta limpia, todas serán castigadas. Si su armario o cama esta desordenada, serán castigadas. El horario de desayuno es 5 a 7 y se espera que TODAS desayunen. Las cocineras toman nota de cada alumna que va a desayunar o a comer y anotan los nombres en una lista. Por ende quien no se presente puede esperar también ser castigada. Cualquier tipo de falta de respeto será motivo de castigo y hasta se les podrá retirar un liston por eso. Si una alumna sintie la urgente necesidad de interrumpir mientras alguna de nosotras hablamos deberá levantar su mano y esperar a que se le de permiso. Si…………–

Mientras Stella daba ordenes constantes, las chicas esperaban impacientes. Las gemelas intentaban recordar todas las ordenes ya que ya sintieron en carne propia lo que pasa al no hacerlo. La mente de Mariela, y en especial su mirada, estaban fijos en los muslos rojos de las gemelas.

Se sentía indignada de que compañeras suyas hallan pasado por tal humillación y tanto dolor. La indignaba y asustaba pensar también, que siendo ella otra alumna mas, podría pasar por lo mismo si no cumplia las numerosas ordenes. Y sin embargo, se moria de ganas de dibujarlas. Su mente se perdia de la conversación y se dirigía repetidamente a las numerosas escenas que quedaron grabadas en su cabeza. Como se retorcían ante el dolor en su cola, la forma en como saltaban y tomaban sus traseros, y como Annie sollozo en el pecho de su hermana.

- Bueno, como tenemos tiempo libre antes de la primer clase, daremos un tour por el Internado asi empiezan a sentirse en casa si?- Dijo Ortiz, intentando ser mas amigable. Luego de la eterna lista de reglas que las chicas escucharon y tienen que seguir, ninguna se sintió mas amigable. En especial Mariela que parecía perdida en su mundo.

- Mariela!! Escuchaste?- Dijo mientras todas hacían fila para salir.

- S-Si..- respondio e intento seguirlas. Aprovecho y camino detrás de las gemelas.

Mientras caminaban, Mariela las seguía de atrás y su mirada continuaba perdida. Ambas caminaban incomodas, y mientras se sobaban por debajo de su jumper, se podían ver sus calzones y sus colas rojas. En especial a Amy que se sobaba con ambas manos. No pasaron 2 minutos desde que salieron, y ya comenzaron sus peleas.

- No podíamos dejar que nos quiten los listones? – Protesto Annie mientras intentaba sacarse las lagrimas que le quedaban. Al fin dejo de llorar, pero quedo muy adolorida.

- Yo si lei el folleto, creeme que fue la mejor opción.- Aclaro Amy, comenzando a molestarse.

- Pero… por que alguien… en su sano juicio… si podía elegir rincón… eligio nalgadas!!- Exclamo Annie molesta.

- El rincón lo odio, es muy aburrido!!!Y deja de llorar, a mi también me duele!!! Sos una bebe!!-

- Vos sos!!!- Protesto Annie y enseguida Stella les dio un tiron de oreja a las dos.

- Niñas, siguen peleando y las voy a llevar asi. Portensen bien. No quiero escuchar peleas.

- S-Si Madre Stella. – Dijeron ambas al unisono. Apenas volvió a su posición, Amy la miro a su hermana e imito a un bebe chupándose el dedo. La otra molesta le saco la lengua.

Alice, quien escuchaba en silencio la situación, se tapo la boca y se rio.

- Son como dos nenitas. – Dijo Jessica, molesta frente a tanta tontería. Amy volteo y estuvo a punto de decir algo hasta que su hermana le tomo su mano y puso rostro de preocupación. Ella luego de eso volteo y ambas se tranquilizaron. Finalmente llegaron al lavadero y Ortiz explico. Su voz se volvió mucho mas dulce, ya que Ortiz ama enseñar.

- Bueno chicas, aca tienen todo lo necesario para lavar su ropa. Deberan lavarla a mano claro esta. Hay jabon en barra, aromatizantes….

Pero Stella, continuo con sus ordenes militares.

- Poseen todo lo necesario para una higiene decente. No se tolerara ni una mancha a partir de la semana que viene, y ni un olor desagradable. Quienes hallan sido tan mimadas como para no saber lavar su propia ropa les conviene aprender rápidamente. ¿Esta claro jovencitas? –

- Si Madre Stella…- Respondieron todas obligadas. Todas menos Jessica y Mariela. Jessica no era del tipo de chica que diría “Si señora” “No señora” todo el dia. Y Mariela… estaba perdida en dibujos de las gemelas.

- MARIELA GOMEZ!!- Exclamo y la chica reacciono sobresaltada.

- SI SI? –

- Escucho ALGO de lo que dije?

La chica bajo la cabeza.

- Cintio y Gomez. Llamas o arrepentimiento. YA!

Mariela se alarmo ante la sentencia. Ella no había leído el folleto, pero recordó lo que la gemelas y Alice hicieron. Sin embargo tener que hacerlo era tan humillante.

- Que hice!- Protesto Cintio, poniendo sus manos en la cadera.

- Se te ordena responder diciendo “Si Madre Stella” igual que el resto de las alumnas.

- Por eso me van a castigar? Por eso?

- Si no queres hacerlo por tu cuenta, yo te obligo. – Sonrio maliciosamente Ortiz.

Cuando Amy vio que Stella ya llevaba contados 5 segundos con su mano, exclamo: Marie, Adopta la misma posición que nosotras. Sino te van a sacar el liston. Y si te sacan los dos te mandan al purgatorio y es horrible.

- Dejalas ir. Va a ser divertido verlas en mameluco y con el culo lleno de Marcas de varazos. – Contesto Alice.

-  Alice, Llamas o arrepentimiento.- Ordeno Ortiz. – No tenes permitido hablar de esa forma.-

Alice se encogio de hombros, y busco un rincón notando que incluso ahí había uno pintado de rojo y con un banquito. Camino hacia el, arrodillándose en la posición de castigo.

Mariela, al escuchar lo ultimo suspiro, y Jessica también.

- M….- Protesto Jessica, y ambas se apoyaron en sus rodillas, exponiendo sus traseros. Ortiz se acerco a Jessica, y Stella a Mariela.

Las gemelas observaron espantadas, como la lluvia de azotes caia sobre las colas de sus compañeras. Mariela se retorcia y gemia sin parar, con su cara roja como un tomate. A partir del azote 30, comenzó a lagrimear levemente por la bronca, el dolor y la humillación.

- Asi van a ser nuestros siguientes 6 años aca…-

- Y hoy es solo el primer dia…-

Jessica y Ortiz tenían su propia competencia. Ortiz estaba decidida en darle otra lección a Cintio. Pero la chica orgullosa, no quería soltar sonido. Decidida a mantenerse en su posición y no otorgarle el placer de verla llorar, logro soportar 20 azotes sin gritar como lo hacían las demás chicas. A partir de los 20, comenzaron los gemidos de dolor, y aun asi, pocas veces se flexiono. Ortiz, molesta, dio azotes especialmente fuertes y repetidos obligándola a flexionar sus rodillas y quejarse. Pero había un limite para estos, y finalmente Jessica resistio el castigo sin llorar ni gritar y en perfecta posición. Mariela, en cambio, volvió a la fila sobándose, limpiándose las lagrimas y muy adolorida, soltando pequeños gemidos y con la cara roja como un tomate por la vergüenza. Mientras esperaban que Kant vuelva de su rincón, a todas empezó a llamar la atención que Rhonda parecía no estar ahí. Ella apenas podía se alejaba unos pasos, pero siempre mantenía cerca.

- Lynd, recuerda algo de todo lo que dijimos?

- Si.

- Podria recordárselo a la clase?

Y la chica efectivamente pudo. Kant finalmente volvió a la fila, y continuaron caminando al siguiente lugar. Primero vieron las regaderas, los baños y luego caminaron hacia donde estaría el comedor, el salón de ocio, la biblioteca, y el purgatorio.

Mientras caminaban, Mariela avergonzada y adolorida, sentía su mente confusa y trastornada. Quienes leyeron posiblemente habran descubierto que Mariela sintió disfruto bastante ell ver a sus compañeras castigadas. E incluso ahora, continua espiando sus traseros entre cada salto y movimiento torpe de las jovencitas, y obsecionada con el color rojo que alcanza a verse levemente asomar por los calzones y que el jumper no alcanza a tapar. Le llamaba la atención como las gemelas rápidamente olvidaron lo sucedido y continuaban jugando entre ellas y peleando. Amy era muy saltarina, solia molestarla a su hermana, a veces la jalaba y le hacia cosquillas en sus peleas. Constantemente las monjas debían regañarlas, y Mariela se moria de ganas de verlas nuevamente recibiendo varazos. Todos estos movimientos torpes hacia que pudiera espiarlas constantemente.

A partir de esta informacion para cualquier lector seria lógico suponer que Mariela se encontraba en un paraíso, y que a pesar de sus lagrimas, disfruto enormemente el castigo que recién se le impartio. Pues déjeme decirle que no y ese es el gran conflicto emocional de Mariela. Lo sufrio igual que cualquier otra. Sintio el miedo terrible al ver a Stella contar. La bronca e impotencia de tener que exponerse. La vergüenza y humillación de la posición. El pavor mientras sentía la vara apoyarse en su cola. El intenso dolor de los azotes. La bronca de tener que mantener la posición, de sentirse obligada. El llanto, la vergüenza, el dolor, la bronca, la impotencia. Y las lagrimas.

Ahora caminaba humillada y adolorida. Recordaba todas esas emociones con disgusto y bronca. Pero sin embargo, mientras veía a las gemelas, y sus traseros rojos, imaginaba las emociones en ellas y sentía placer. “¿Cómo podía sentir algo tan horrible?” Pensaba. “Solo debe ser inspiración, solo debo querer dibujarlas… tengo que hacerlo cuando nadie me vea.”

Saint francis cap 2 (spin off)

El grupo de Stella se adelanto, y finalmente llegaron a un pasillo con 3 vestidores. Normalmente, las chicas avanzan en 3 filas. Pero este año prácticamente no hubo inscriptas.

- Esperen afuera, Tu, Entra conmigo. – Dijo Stella señalando la primer gemela.

- S-Si señora…- Respondio tímidamente la chica. La otra gemela, y la ex – chica tétrica/ahora nerd de anteojos quedaron del lado de afuera.

El vestidor era bastante amplio, Tenia muchos espejos y alfombra de tela. Habia una silla en medio de la sala, y un gran armario. La chica entro curiosa mirando a ambos costados.

- Desnudate y pon tus cosas en esta casa. –

- D-Desnudarme!?- Pregunto Annie.

- Si.- Dijo la mujer y busco el uniforme de ella en el armario. Volteo y la chica aun no comenzó. – Que esperas? –

-Es… que…-

La mujer de piel oscura se cruzo de brazos y ordeno: Si no lo haces lo hare yo.

La chica rápidamente comenzó a sacarse sus zapatos, pero luego de quitarse sus calcetas la miro tímidamente.

- Ambas somos mujeres, no hay nada que no haya visto antes. Pon todo en esa caja. – Ordeno. Finalmente encontró su uniforme, y ropa interior, además de calzetas y guillerminas. Cuando volteo, la chica apenas estaba en bracier y bombacha.

- Aun no terminas?

- Tambien tengo que sacarme esto?

- Por supuesto que si!! – Exclamo la negra. Asustada, la chica obedecio y luego de colocarlo en la caja, se tapo sus genitales.

- Pontelo. – Dijo alcanzadole una camiseta y unos calzones.

- Parecen de niña…- Respondio la chica, y se los puso.

- Se tardan…- Dijo Mariela nerviosa. Finalmente salio Annie, con la cara roja como un tomate y estrenando su uniforme.

- Jajajajaja….. Awwwww, que tiernaaaa!! – Bromeo su hermana. Annie aun mas sonrojada protesto: Basta!!!

- Dejame besarte!- Continuo su hermana intentando besarle la mejilla.

- No, basta!!- Protesto Annie avergonzada.

- Dejen de pelearse. Tu turno. – Dijo stella señalando a la otra gemela, la cual puso un gesto de terror. Finalmente terminaron la ex chica tétrica y la chica uniformada, en un largo silencio incomodo. Avergonzada, la chica uniformada se mantenía cabizbaja, volteaba o se sobaba los brazos.  La otra chica no dejaba de inspeccionarla. La verdad no había leído el folleto y ni sabia como era el uniforme que iban a tener que usar hasta ese momento.

“Es… tan infantil… En serio voy a tener que usar eso??” Pensaba mientras lo miraba. “Y es… Dinminuto…”

Finalmente, Amy Hastur salio del vestuario y los rolles se invirtieron.

- Awww que tiernaaaa!!!- Se vengo Annie.

- JA JA JA Que graciconejito…- Protesto Amy.

- Dejame agarrar tus cachetitos!!- Continuo annie. Soltandose, Amy protesto. – Queres pelear?!

Ambas forcejearon un segundo, hasta que Amy sometio a Annie a una lluvia de cosquillas.

- Jajajaja basta basta!!! –

- CHICAS, DEJEN DE PELEAR.

Ambas gemelas frenaron en el acto y se pararon firmes cual soldadas.

“Parecen niñas…. En serio tienen mi edad?”

- Tu turno.

Cuando la chica tetricta y stella entraron, las gemelas continuaron peleando.

- Te ves tan toooooooooonta.-

- Somos gemelas, nos vemos iguales. – Contesto Annie.

- Pero yo no tengo esa cara de tooooonta.-

Ya desnuda y tapando sus genitales, Mariela vio como cerraban en un cajón su roja.

- Que van a hacer con ella.

- Nos la quedaremos. Ahora esta será tu ropa. Pontela. –

- ….Parece las que usaba de nenita… Me quedaran?- Pregunto viendo el calzon y la camiseta.

- Estan hechas a medida.

La chica se puso la camiseta. Tomo el calzon para ponérselo, y noto el logo de Saint Francis, su nombre bordado y un letrero mas…

- Monday….

- Deja de demorártelo. Aun tienen mas pasos que seguir.

La chica con timidez se puso el calzon y luego se vio su trasero, notando que efectivamente le quedaba a la perfeccion.

- Por que dice… lunes?

- Reglas del colegio para mantener la higiene.

- Esto es lo mas ridículo que he hecho en mi vida… ow!- Protesto sintiendo una nalgada.

- Deja de quejarte y continua vistiéndote.

Mientras tanto, afuera, las gemelas seguían peleando.

- Yo no soy tonta. Tu eres la tonta. Hasta veniste con tu conejito de peluche.

- No puedo dormir sin el…-

Y finalmente salio Mariela Gomez, estrenando su nuevo uniforme y con su cara roja como un tomate.

“Esto es lo mas ridículo que he hecho en mi vida…” Volvio a repetir.

Ortiz, por su parte, noto que rápidamente Stella se había alejado. Ni siquiera tuvieron que esperar para hacer que Alice, entre al vestuario. Ortiz también se demoro en convencer a Jessica en cortarse el pelo. Tanto Alice como Jessica se veian muy molestas, Jessica muy enfadada.

Finalmente, llegaron al pasillo. Ortiz entro al vestidor con Alice y ordeno:

-          Te desnudas y pones toda tu ropa en esta caja. Luego te pones este uniforme. – Dijo Ortiz.

-          JAJAJAJAAJA ¡!Estas loca si crees que voy a hacer caso!! – respondió Alice orgullosa. – Eso parece un vestido de niña!! Es una locura. No creas que voy a durar mucho tiempo aca, tocame y en dos segundos tenes una denuncia de mi padre. –

Enseguida entro Stella al vestidor.

-          Que haces aca?

-          Supuse que ibas a tener problemas. – Dijo Stella. La altanería de Alice se desvaneció.

-          Ella esta negándose a continuar con el ingreso?

-          Si…- Protesto Ortiz, sintiéndose desautorizada.

-          Es simple, o te cambias, o te cambio yo.

-          Y como crees que vas a hacer es….-

La jovencita no termino de decir la frase, que Stella la jalo de la oreja, la tiro sobre sus piernas y la nalgueo sonoramente.

-          AYY AYYY AYY ME VOY A VESTIR ME VOY A VESTIR!!- suplico Alice, luego de unas 50 nalgadas.

-          Ahora te voy a vestir yo.- Dijo Stella.

Ortiz observo indignada, como su compañera humillaba a esa chica. Comenzo por desnudarla, y guardar sus cosas en una caja. Luego, rápidamente y a las ordenes la vistió con ropa interior y calcetas.

-          No quiero usar eso… es ridículo…- protesto Alice adolorida, viendo como la vestían. Stella la ignoro, le puso la blusa de marinera, y rápidamente su jumper.

-          ESTO ES RIDICULO!!- Protesto, y se gano mas nalgadas.

-          QUIETA!- Ordeno stella.

Ortiz no pudo evitar reírse, viendo como la modelito, termino vestida con el uniforme de Saint Francis. Se veía muy humillada, y un par de lagrimas corrieron su maquillaje.

-          Enseguida te voy a quitar ese maquillaje, a quien se le ocurre. Por suerte, me advirtieron que eso podía pasar. ESE TIPO DE ACTITUDES ESTAN PROHIBIDAS AQUÍ. Aquí vienes a aprender, no a seducir. – Ordeno Stella. Tomo una gasa con alcohol y le limpio toda la cara. Le dio una fuerte nalgada y le ordeno. – Espera con las otras tu turno, ahora las llevo.-

La chica salió sobándose y Stella ordeno a Ortiz. – Has pasar a las otras.

-          No puedes dejar 4 chicas solas. Deja que yo me encargue.

-          Tu?- Pregunto ella. Ortiz no era muy alta. Stella en cambio era incluso mas alta que Rhonda.

-          Si, YO!- Aclaro Ortiz, no dejándose pasar.

-          Si yo voy y las cuido, y tu aca lo haces mal, que crees que pase con vos?

-          Nada, yo lo voy a hacer bien. – Dijo Ortiz.

Stella finalmente salió y vio al resto de las chicas. Las 4 tenian sus rostros rojos como tomates. En especial Alicia que de paso, se sobaba tímidamente su trasero. Stella sonrio sastisfecha. La modelito y la chica tétrica, ahora se veian como niñas pequeñas, listas para ser educadas por sus Madres. Stella entendía lo particularmente vergonzoso que era para chicas en crecimiento sus uniformes de novata. Era una época/año/país en donde las mujeres, adultas, rara vez eran vistas en minifalda. Todas usaban vestidos largos a la vieja usanza, los vestidos cortos, diminutos al igual que los shorts eran exclusivos de los niños. Era visto como la inocencia de la edad eso, y sin ningún tipo de connotación sexual. Todo lo contrario, caricaturas de la época como la pequeña lulu, o minny mouse usaban vestidos muy cortos y enseñaban regularmente sus calzones como si no se dieran cuenta. Naturalmente en esa época se asociaba como sinónimo de la infancia, asi que para las chicas, en especial alguien tan vanidosa como Alice era muy vergonzoso. Pero era la imagen que era necesaria para poder comenzar en el tan valioso proceso de educación y disciplina. Cada uniforme estaba especialmente hecho a la medida de cada alumna, confeccionado inmediatamente luego de la inscripción, y cada prenda, incluyendo sus grandes listones, tenian la identificación de la alumna que la usaba. Gracias a esto, para Stella era mucho mas fácil identificar a las gemelas, e incluso a Alice de Mariela ya que con el mismo peinado y ropa llegaban a parecerse mucho (al menos de espalda se ven idénticas excepto por el color de pelo y la altura).

Rapidamente se fijo en el jumper y reconoció el nombre de cada una.

-          Annie hastur, tu primera. Que te siga tu hermana. Luego Cintio, Luego Kant. En ese orden. Marchen niñas.

Las 4 marcharon apenas escucharon la orden. Stella las siguió desde atrás, notando que el jumper apenas alcanzaba a tapar las marcas de las nalgadas que le dio. Sabia que en un futuro no tendría permiso de azotarlas asi. Y por eso prefirió marcar presencia.

-          Sentate aquí nena. Veamos… Annie Hastur, Edad: 15 años. Altura 1.45, pesas solo 45 kilos? Aquí están tus medidas. Bueno, espera aquí. Quietita, te sacare una foto para tu expediente. Toma, ponte tu rosario y recuerda llevarlo siempre.

-          Annie, espera al lado de la puerta mientras las otras pasan.

Stella volteo y noto que Ortiz aun no venia.

-          Amy Hastur… edad 15, altura 145. 45 kilos…..Mariela Gomez. 15 años 1.55 50 kilos… Ok, Quieta.Alice Kant Edad 15… 165 53 kilos…

-          Aun no llegan… Chicas, afuera.

Las 5 salieron. Y esperaron. Los nervios de las gemelas se volvieron aburrimiento, y Stella tubo que tener mas Vigilada a Amy, la cual era muy inquieta y curiosa. Annie no se despegaba de su lugar. Mariela continuaba con su rostro rojo como un tomate, y Alice no dejaba de verse la ropa y de sobarse de vez en cuando.

-          Por que te sobas tanto? Tu cola se ve roja.

-          Deja de meterte tanto nenita tonta.

-          Tenemos tu misma edad!!- Protestaron ambas al unisono.

-          Chicas! Si empiezan a pelear comienza el reparto de castigos.

Finalmente, vieron salir a Rhonda con su uniforme. Se veía muy raro, una chica tan alta y ruda vestida de esa forma. Y un poco ridícula. Las gemelas se rieron tapándose la boca. Y a Jessica también, sobándose junto a una Ortiz victoriosa.

-          Bueno, ya podemos llevarlas a su habitación?- Protesto Stella.

-          Si. – Dijo Ortiz.

Mientras caminaban, Amy observa con curiosidad que habían muchos rincones, pintados de color rojo, y con banquitos pequeños para rezar en ellos. Llegaron a sus habitaciones, la cual tenia capacidad como para 20 chicas. En cambio solo eran 6.

-          Bueno chicas, pueden encontrar sus uniformes, y su objeto personal que eligieron en sus armarios. Veran que sus armarios están identificados al igual que sus uniformes. Nosotras seremos sus Dorm Mom, y ustedes vivirán juntas aquí. Les daremos un tiempo para que se ubiquen y luego continuaremos introduciéndolas al internado. –

Amy rápidamente corrió buscando el suyo. Al hacerlo, se saco sus guillerminas y se subió arriba de la cama gemela.

-          La mia es la de arriba!!

-          Mejor para mi…

Rhonda se puso a escribir su diario, y Alice veía indignada la ropa.

-          No puedo creer que me hallan obligado a usar esto… Quien puede tener tan mal gusto!!! Es tan horrible… Estar aquí va a ser una tortura. Cuando se entere mi papi de lo que me hicieron…

Mariela vio asustada a Rhonda que estaba furiosa, parada frente a su armario. Luego observo las gemelas. Roja como un tomate pensaba: “Nunca use algo tan ridículo en mi vida… No puedo creerlo… Aca en el armario no hay mas ropa que estos ridículos uniformes… Donde esta todo lo que traje…!?” Pensaba. Luego vio a Amy y Annie peleando “Pero las gemelas saltan y saltan como si no les importara. “

Fijandose bien, se fijo en el jumper que la saltarina e inquieta era Amy. “No puedo creer que tengamos que usar calzones semanales con el logo…. A quien se le ocurre algo asi!?” Penso.

-          Ven.- Ordeno Amy.

Annie asintió con su cabeza y se paro.

-          Hey… vamos a ser compañeras. Y estamos encerradas aca. Que tal si nos vamos conociendo?

Ninguna hablo. Annie intento volver a la cama, pero Amy la agarro.

-          Nosotras somos Annie y Amy Hastur!

-          Como si no lo supieran, tenemos nombres hasta en el culo. – Contesto Annie

-          Haciendote la graciosa eh!!!- Dijo Amy y empezó a hacerle cosquillas

-          Jajajajajaja jajajajaj basta basta!! –

-          Por que no supones que si queremos hablar hablaríamos? Quien quiere juntarse con dos bebitas.

-          Tenemos tu misma edad!- Protestaron ambas al unisono.

-          Para mi son bebes. Todas ustedes.

-          Que amargada. – Protesto Amy. Tu si quieres que seamos amigas Marie?-.

-          Suena muy cursi eso amy.

-          Queres cosquillas?

-          Eso también suena cursi…-

-          Jajaja…- Dijo Alice.

-          De que te reis?- Protesto Rhonda.

-          De que tu nos llames bebitas. Acaso leyó alguna el folleto?

-          Yo si…- Dijo Amy. Rhonda levanto su mano.

-          Bueno, rápidamente conseguiré puntos y las bebes serán ustedes. En especial la que quiere hacerse amiga de todas. Que cursi.

Amy protesto dando un pisotón y Annie la tomo del brazo. – Amy…

-          Parecen dos bebes. Cuantos años tienen 8?

-          Si nosotras somos bebes, por que ustedes tienen el culo rojo?

-          Uy pendejita, vas a ver…- Dijo acercándose. Ambas dieron un paso hacia atrás.

-          GEMELAS HASTUR, KANT CINTIO!!!!! – Ordeno Stella. – LLAMAS O ARREPENTIMIENTO!!- 

Saint Francis (Spin Off) Cap 1.

Finalmente le hice su primer historia al internado. Yyyyyyyyyyyy........... recicle personajes!!!

Bueno, espero les guste. Si, los tengo hartos con historias que empiezan y nunca terminen.

Capitulo 1. (Tube que centrar el texto... por que esta roto el blog y no me reconoce los cuadros de dialogo)

Mientras el chofer esperaba, la monja esperaba que la jovencita llegara. La madre enseguida trajo el bolso pidiendo disculpas.

-          Esta enfadada, lo siento.

El padre enseguida salió, arrastrándola del brazo.

-          NO PIENSO IR!!! NO TE PODES DESHACER DE MI!!

Su hermana menor y mayor la seguían, entre riéndose.

-          JESSICA!!!CONTINUA GRITANDO Y TE VOY A DAR OTRA ANTES DE IRTE!!

Un poco mas convencida, termino entrando al bus.

La mujer suspiro, y anoto. “Jessica Cintio 15 años”.

Luego de media hora, finalmente pasaron por la ultima alumna. La chica, de también 15 años, parecía maquillada como una modelo. Llevaba un vestido corto, y parecía mas bien de 25, que de 15.

-          Papi… Mami…- Suplico mientras metia el bolso.

-            Alice… es lo mejor que pudimos decidir.

-          Pero…- Dijo, y empezó a llorar.

-          Alice, no lo hagas mas difícil. – Se quejo su mama a punto de llorar también. Tambien te vamos a extrañar…- Suspiro y la abrazo.

Finalmente la jovencita subió.

-          Viejos de mierda… están totalmente convencidos…. Creo que esta vez la cague. – Dijo limpiándose las lagrimas. Su rostro inmediatamente dejo de expresar tristeza.

Se sento y se puso a ver por la ventana.

La mujer leyó la lista, y pensó: “Solo 6 chicas….? Y todas tienen 15? “

Las observo levemente. Una  era una pequeña modelo. La otra, era muy voluptuosa y estaba muy enojada. No dejaba de hacer rebotar, una pelotita de plástico. Habia otra mas cerca del frente, alta, muy ruda, vestida de forma punk, con piercings en el labio y la nariz.

Habia dos gemelas rubias, que no dejaban de pelear. Una tenia los ojos llenos de lagrimas, y estaba muerta de miedo. Llevaba un conejito de peluche abrazado .La otra, se burlaba de su hermana mientras escuchaba su walkman. Finalmente, pudo distinguir al fondo otra chica, la primera que paso a buscar. Parecia salida de una película de terror. Tenia un pelo largoooo y negro.

-          A ver… todas acérquense al frente. Tu también…- Dijo, y miro la lista “Mariela.”

La chica paso al frente, y se pudo ver sus lentes de contacto rojos. Finalmente estaban todas sentadas juntas.

-          El viaje es un poco largo… Dos horas. Asi que mientras leeremos el folleto que les dieron en la inscripción. Espero que lo hayan leído, hay muchos mal entendidos y por eso se los leo yo el primer dia. – Explico.

La mujer se dio cuenta que ninguna la escuchaba excepto las gemelas. Las vio, y reviso la lista “Realmente tienen 15 años? Se ven muy chiquitas”.

Mientras explicaba el ingreso, veía la cara de horror o bronca de las chicas.

-          NI LOCA HAGO ESO!- Protestaba Jessica a cada rato.

-          -En serio tenemos que usar eso??? Esta horrible!! – Se quejaba Alice.

Rhonda continuaba mirando por la ventana, y Mariela estaba inmersa en una carpeta de dibujos.

Una de las gemelas (la mujer no distinguía cual) se veía muerta de miedo… pero lo estaba siempre. La otra, se sonrojaba cuando escuchaba cosas vergonzosas. Apenas comenzaron a escuchar los castigos, Jessica y una de las gemelas protestaron.

-          EN SERIO??

-          NO PIENSO HACER ESO!!!

La protestas continuaron hasta que finalmente llegaron al predio. Esta particularmente alejado de la ciudad, en la suburbana de esta. Cerca de las rejas que envuelven el predio, hay varias casas lujosas, pero la zona es realmente muy tranquila. Cuando pasaron el porton se demoraron un poco en bajar, mientras pasaban por el campo, lleno de arboles. Todas observaron por la ventana, los campos de deportes, la piscina, y la enorme mansión que conformaba su instituto. Finalmente llegaron y la mujer las llevo a un aula de ingreso diferenciada de la entrada principal. Las bajo y dos monjas mas se acercaron. Ambas en uniforme celeste. Una negra, alta, la otra bajita, rubia y de rostro angelical.

-          Nosotras nos encargaremos de ellas. Solo son 6 este año??... – Pregunto la rubia.

-          Si, y todas tienen 15.

-          Esta bien, no te preocupes. – Dijo la negra.

La rubia las miro. Una mini modelo, tenia un rostro desafiante, y sus manos en la cintura. Otra, era de las que se cruzaba en la clase la asaltarían. Una chica de muchos rulos, era muy voluptuosa para su altura. Se veía furiosa y sabia que de ella debería encargarse stella para tranquilizarla. Luego, la chica tétrica, vestida enteramente de negro y que parecía salida de una película de terror japonesa.

Y al final, las gemelas. La rubia también reviso y se fijo que efectivamente ambas tienen la misma edad que sus compañeras. Una se abrazaba a si misma, muerta de miedo, mientras que la otra se burlaba de su hermana y no dejaba de hablar.

-          Chicas, Silencio.- Ordeno la negra. Tenia un tono tan autoritario que todas se callaron al instante.  La rubia la miro con desconfianza. Ambas habían sido asignadas por primera vez a ser Dorm Moms de una habitación. Se les encargaría la educación y disciplina de 6 jovencitas indisciplinadas. La chica rubia amaba enseñar… pero tenia miedo. Nunca había nalgueado una chica antes, aunque participo en los numerconejitos entrenamientos. Y con numerconejitos me refiero a numerconejitos. El internado pone extremo énfasis en la disciplina, y gran parte de su carrera es precisamente lecciones acerca de cómo castigar jovencitas. Sumado a eso, varias de las ingresantes son delincuente juveniles. Suelen ser hijas de padres adinerados y la única alternativa a la cárcel que encontraron. Estas suelen revelarse siempre, y han aprendido a someterlas y posteriormente castigarlas. Ademas de eso, llevan una rutina diaria de ejercicios y deben estar siempre en forma.

-          A partir de ahora realizaremos el ingreso, EN ORDEN, tal como se vio en el folleto. Espero lo hallan leído. Cualquier tipo de rebeldía será castigado al instante. Hagan una fila y marchen.-

-          Mi nombre es Madre Ortiz.- Dijo la rubia. O madre Ortiz. – Sere su Dorm Mom.  Ella es Madre Stella. – Intento aclarar. Las chicas la ignoraron e ingresaron todas.

Las primeras en ingresar fueron las gemelas, luego las siguió la chica tétrica y finalmente, la vanidosa, la delincuente y al final, la voluptuosa.

“Que graciosa, me dejo a mi las mas difíciles”. Penso Ortiz.

El primer cuarto, es definitivamente el mas impactante para todas. Las chicas, esperaban en fila e iban ingresando de a una. La primera fue la que estaba muerta de miedo , que naturalmente, obedeció todo al instante. Lo primero, fue entregar todo tipo de objeto personal. Ambas, obedecieron, aunque la gemela del walkman, se molesto. Finalmente paso la chica tétrica, la cual entrego su carpeta de dibujos.

-          No te preocupes. – Dijo Stella. – Tienen permiso a un objeto personal sin necesidad de puntos. – Ahora quitate esos lentes de contacto.

-          Y con que veo?

-          Ella es Mariela Gomez. Tienes sus anteojos?

Finalmente, la jovencita termino usando unos gruesos anteojos de nerd. Todas pasaban por un largo examen medico luego de la inscripción.

-          Y ahora esas muñequeras.

-          NO!Estas no!!

-          Desobedencia equivale a castigo Gomez!!

-          P-Pero…- Suspiro Gomez, se las quito levemente revelando cicatrizes.

La mujer hizo una pausa. Lo pensó repetidamente. Finalmente dijo: hablare a ver si te permiten dos. La siguiente.

Mientras Stella pasaban al siguiente cuarto con las chicas, Ortiz, y el resto las seguían. No tubo muchas dificultades, entregaron todas rápidamente sus objetos.

Llegaron a un lugar, con 3 peluqueras. Las gemelas se sentaron y Stella tubo su primer problema.

-          El pelo no por favor!!!- Suplico la chica tétrica. Luego de unas nalgadas y gritos, termino sentada igual que las otras. Y se les hizo a las 3 el corte de cabello reglamentario.

Cuando llego el turno de las otras, ninguna dio problemas, salvo Alice.

-          Es necesario que me corte el pelo?

-          Si.

-          Pero mira, yo me puedo hacer trenzas asi. Es fácil.

-          Si tienes que hacértelo. – Dijo Ortiz.

-          Pero mire…

-          Si no te dejas hacer el corte reglamentario, seras castigada.- Dijo Ortiz intentando ser firme.

-          Esta bien… Esta bien…- respondió la chica. Y finalmente, había 6 chicas en trenzas bajas.