17

Cuando lo lei, enseguida empeze a llorar. Intente llamar mil veces, y fue en vano. “Voy a ir all a gritarles!” Proteste.

-          Romi, calmate, que te pasa!

-          Mira esta nota…

-          Bueno… algunos amos son muy exigentes.

-          Tengo que verlos!

-          Tranquila, ya esta! Escucha, si ya no te quieren tenes que tranquilizarte y seguir tu vida.

-          Pero yo…

-          Pensa las cosas mas tranquilas Romi! Ahora ya tenes tu ropa.

Creo que mi ropa me hace pensar como nena. O estoy loca, no se. Asi que me cambie, y disfrute un poquito de mi añorada libertad. Me preocupaba una y otra vez, y me angustiaba. A veces me volvían las ganas de llorar. Espere todo el dia que el celular sonara y nada. Tambien llame. Y me fui a la casa a esperar en la puerta, nada tampoco.

Hasta que volvi a la casa, y espere a Friz.

-          No… se nada de ellos.

-          Ya no importa Romi.

-          Puedo, quedarme aca?

-          Si, pero tenes que conseguir trabajo rápido. Yo no puedo mantenernos a ambas.

Asi que a partir del otro dia, volvi a las entrevistas de trabajo. Pero las entrevistas… me iba mal en peor. Yo estaba deprimida, ya me había acostumbrado. Me había acostumbrado a mis clases, a mis vestidos, a las travesuras, y… al señor X. “papi…” pensaba y suspiraba.

Mi papa real murió. Murio a mis 13. No era para nada el típico papa spanker, no me pegaba. Y si me aconsejaba. Yo era …. Bueno, me portaba bien. O mal. A veces. Me daban los castigos típicos, no salir con mis amigas… o algo asi. Sin embargo… Tenia amigas que eran nalgueadas en sus casas. Amaba ir a su casa por eso. A veces de improviso. Si veía que caminaban raro, o se sobaba un poco… O se sentaba en su pulover, o algo asi, seguro las habían castigado!! Y había una amiga en especial que tyo amaba. Se llamaba Mariana. Su papa me parecía genial, era muy simpatico y todo. Un dia … Mariana quería fingir ser rebelde conmigo, nos provocaba y todo. Teniamos 12 años, y llevo unos cigarrillos a casa. Su papa la descubrió fumando. Llamo por teléfono a mi papa. Luego tubo un sermón con los 2, y luego nalgueo a Mariana enfrente mio. Fue solo sobre la ropa. Y no fue fuerte, pero fue muy largo. Mariana tenia la cara roja como un tomate. Lloro mucho, y luego estaba muerta de vergüenza y adolorida. Su papa quizo abrazarla, pero ella no se dejo por que le daba vergüenza que estuviera yo. Cuando mi papa me vino a buscar, vi como lo hacia.

Al llegar a casa, mi papa solo me regaño por horas… y luego no me dejo salir por 2 semanas. Odie a mi papa por eso. No sabia bien por que. Pero ahora lo se, desde muy chiquita yo ya era spankee. Sentia envidia de mis amigas por eso. Le reprochaba no castigarme como a ellas, y sentía bronca hacia el por eso. Al año mi papa murió…. Fue un excelente padre. Pero… Quiza por eso estoy tan loca. Quiza por eso me gusta eso. Quiza por eso soy tan rara. Ahora que veo hacia atrás. Quiza era mucho mejor regañarme y no dejarme salir,  a nalguearme enfrente de una amiga. Mariana lloro mucho y se murió de vergüenza. Pero en esa época yo lo odiaba por eso. Y ahora… es como si hubiera buscado un papa nuevo. Y es como si hubiera encontrado el que siempre soñé y luego…

Esa semana me deprimi mucho. Mi niña interior lloraba a diario. Buscaba a quien hacerle travesuras, pero ni friz me aguantaba. Y ese sabado volvi al bar junto a Friz para ver si Pau estaba. Pero no.

Cuando llego Friz a casa, me encontró vestida con lo mismo con lo que me fui a pinamar tirada boca abajo y abrazada a un peluche.

-          Que haces vestida asi?- Pregunto y luego dijo con cierto tono de asco- Tu bombacha dice viernes…..

-          La lave antes de usarla, no te preocupes- Respondi seria y enojada.

Ella se agacho al lado mio y puso una mano en mi espalda. – Que te pasa romi?

-          Los extraño muchísimo… No sabes nada de ellos?

-          No…

-          Dejame sola entonces- Me queje.

Senti que su mano dejaba mi espalda, y la escuche pararse. Luego hacer una risa débil

-          Ahora entiendo al señor X… yo también te nalguearía.

-          Ojala me nalguearan.- Proteste.

Los siguientes días me agote la provisión de marihuana de Friz, y el martes no aguante mas. Me fui caminando hasta la mansión del señor X con mi bolso, llore, ggrite, y estuve… mucho tiempo, no se cuanto, mi cuerpo ya no aguantaba y me quede dormida.

Desperte mareada, y agitada. Sentia como mi cabeza daba vueltas. “Me parece que no solo fume ayer, sino que además…” pensé, y abri lentamente mis ojos. Al abrirlo, vi un techo rosa pastel.

-          Donde estoy!!? Exclame. Era …. Mi habitación!!! Me pare entusiasmada, estaba usando mi pijama enterizo! Me abraze a mi misma.  Baje la cabeza, y sentí moños asomar. Tenia mis coletas!!! Nunca me alegro tanto tenerlas!!.  Sonrie llena de felicidad. Y luego al acercarme a la mesita de luz, vi una notita.

-          Aceptas tu castigo, si o no?

A la derecha, tenia ropa de la que usaba siempre. A la izquierda, mis calcetas con voladitos, mis guillerminas, mi bombacha que decía miércoles, mi camiseta lila, y un eageradamente infantil vestido de ositos cariñosos. Era tan infantil que seria prácticamente ridículo y parecía un disfraz.

Suspire, resignada, y comenze a sentir el ardor en mis cachetes. En mis 4 cachetes, ya que ya me imaginaba la vergüenza que iba a pasar.  Pense mucho, por que luego de la ultima reflexión, acerca de mi padre, me sentía mas insegura todavía. Mas que nada, por que… un poco me gustaba la humillación y el dolor. Bueno, bastante. Pero mi lado infantil gritaba que deseaba volver a ser una niña. Despacio, me desvestí, doble bien el pijama (no sea cosa que luego me castiguen por eso) y comencé a vestirme con la ropa del lado izquierdo. Cuando termine, me mire en el espejo, sintiéndome absolutamente ridícula. El vestido era cortísimo y con solo inclinarme un poquito ya asomaban mis pantys. – No es tan malo… en comparación a al fin volver- Pense.

No me salía abotonarlo, asi que tuve que ir sosteniéndolo hasta el comedor. Y en el comedor me esperaban…. X, Pau y Friz.