Los primeros días, habran sido intensos y complicados.
Pero el tiempo termina como siempre, volviendo todo rutina. Nunca fue a la
escuela, sin embargo, todos los días Romina le daba unas clases. Era como tener
una Tutora, debía usar uniforme para esas clases, y duraban mucho tiempo. Era
extraño ser regañada por quien parecía ser una adolescente, pero Mariana ya se
había acostumbrado a ser siempre la niñita de la casa. Su pasado paso a ser
como un sueño para ella, y ser una niña, su realidad.
-
Creo que el primer paso ya esta completado.
-
Ya no hubo mas conflictos.
-
Mariana se despertó en lo que parecía ser una
mañana normal de sábado cualquiera. Ella estaba usando un pijama celeste
enterizo, pero con un dibujo marron de oso grande adelante, y otro en su
colita. Su nombre estaba en su pecho, y también en su cola, y tenia abertura
por detrás. Sin embargo se despertó de muy mal humor.
-
Que pasa…- Pregunto aun dormida.
Con los ojos entreabiertos pudo ver que era su papa quien la despertaba.
-
Vamos nena, tenemos que bañarte e
irnos.- Protesto el papa.
Mariana hace unos
cuantos días que no era nalgueada, pero sabia muy bien que desobedecer a su
papa era sinónimo de una colita ardiendo. De mala gana, lo acompaño, y termino
en el baño.
El comenzó a
desabotonar su pijama, y Mariana se puso roja como un tomate. Si, siendo una
niña, aun era “bañada” por los grandes. Generalmente su mama lo hacia, y a
veces la dejaba bañarse sola. Sin embargo parecía estar ocupada y por lo visto
su papa era el único a cargo. El la baño pocas veces, y aun no podía evitar
morirse de vergüenza. Pero con lo estricto que el es, no tardaría dos segundos
en terminar boca abajo y pataleando si lo desobedecía. Desnuda, entro a la
ducha, mientras su papa la bañaba. Su papa la baño apuradamente, dándole
nalgadas cuando ella no le facilitaba el baño. Mariana, acostumbrada a lo
estricto que es intento no protestar. Luego de secarla bien, la alzo a upa y la
llevo a su habitación. Le dio una bombacha blanca para que se ponga y luego le
dijo:
-
Mas despierta?-
-
Si papi…- Respondio Mariana.
-
Entonces….-
El señor se acerco
lentamente a Mariana. Ella, aun semi desnuda, se alejo asustada. El señor a ver
su reacción respondió: Mejor te visto primero. Tenes que estar linda por que
hoy se va a hacer una fiesta.
Marcos fue al
ropero, y saco un vestido violeta con ositos. Era demasiado infantil, incluso
para una niña real.
Mariana se sonrojo vivamente y pregunto: Tengo que usar eso papi…?
Mariana se sonrojo vivamente y pregunto: Tengo que usar eso papi…?
-
Si – Respondio secamente Marcos.
-
Pero papa….- Suplico Mariana, pero
Marcos frunció el seño. Mariana ya estaba acostumbrada a los castigos
repentinos que le daba marcos. Se puso roja como un tomate, y volvió a
insistir. – Es demasiado… in…- Luego levanto las manos y cerro los ojos.
Marcos le puso el
vestido, y mientras se lo abotonaba por la espalda entro romina corriendo.
FELIZ CUMPLEAÑOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOS- Grito Romina entusiasmada.
-
Ay no…- Se quejo Mariana.
-
WAAAAAAAAAA QUE
LINDAAAAAAAAA!!!!!!!!!!!- Grito Romina.
-
Juro que intente frenarla- Explico
pablo entrando a la habitación.
“Que vergüenza…”
Penso Mariana, por tener que estar vestida asi en frente del chico que le
gusta.
-
Feliz
cumpleañoooooooooooooooooooooos- Exclamo Romina abrazandola a Mariana.
Mariana se quedo
pensativa, en verdad no recordaba que su cumpleaños fuera hoy. “Era… el 10 de
noviembre creo”.
-
Marianita feliz cumpleaños- Dijo
Marcos.
-
Feliz cumpleaños mocosa- Dijo
pablo revolviéndole el pelo, aun suelto.
-
Gracias…- Respondio Mariana aun
confundida.
Romina la abrazo
aun mas fuerte y dijo: Me toca me toca!
Mariana en dos
segundos se descubrió boca abajo sobre las piernas de Romina. – Que hice!-
Pregunto confundida. Y un poco acostumbrada.
-
Cumplir años.- Dijo Romina. Y
sobre el vestido comenzó a darle nalgadas . – 1, dos, 3 ,4 , 5 ,6 ,7- conto
Romina en voz alta.
-
Ay….- Se quejo Mariana confundida.
-
Mi turno mwhehehehehehe- Se rio
Pablo. Al verlo acercarse Mariana se sonrojo y de vuelta, sobre las piernas de
pablo.- 1 2 3 4 5 6 7 feliz cumpleaños!- dijo pablo luego de darle 7 nalgadas.
Mariana se paro
frotándose la cola. Y luego pensó “deben hacer como con los tirones de oreja,
pero con nalgadas”. – Awwww pobrecita, te duele?- Exclamo Romina.
-
BASTAAA!- Se quejo Mariana.
-
No seas maleducada- Protesto
Marcos.
-
Dejala… Romina es siempre asi con
ella, es normal que se canse.-
Marcos se acerco y
la tomo de la cintura a Mariana, quien se cerro los ojos e intento no quejarse
luego de los 7 chirlos.
-
Ahí esta, feliz cumple.-
-
Bleh… y voy a tener regalos?-
Pregunto mariana.
-
Jajajajaja, me encanta- Dijo
Romina.
-
No deberías decirlo asi- Se quejo
Pablo.
-
No…. Pero voy a tenerlos?-
Respondio Mariana.
-
Uy…-
-
Quiero peinarla!- Exclamo Romina.
Y tomando de la mano a mariana, la hizo sentarse y comenzó a cepillarle el
pelo.
Marcos dejo la
habitación, y Mariana vio como Pablo comenzaba a buscar sus zapatos y soquetes,
y se los empezaba a poner.
Mariana sintió a
Romina hacerle sus colitas, y luego le pido a Pablo que lec alcanze los moños.-
Jajajajaa, pareces una bebe. Para papa debes tener 3 años. – Se rio Pablo
mientras le alcanzaba dos moños a Romina. Mariana se sonrojo de vuelta, mientras
Romina le comentaba: Es una bebita.
Luego de terminar,
bajaron. Mariana observo sorprendida como realizaban una fiesta infantil para
ella. Vanesa preparaba la comida y Romina junto a Pablo los decorativos
infantiles. Mariana se sento en el sofá, sintiéndose ridícula hasta que escucho.
-
Pablo , No le haces el desayuno a
la nena?-
-
Si ma!!-
Mariana se fue hacia
la cocina, donde vio a Vanesa cocinando, y a Pablo haciéndole el desayuno.
Vanesa sin embargo se veía muy concentrada cocinando.
Vamos Mari, - Dijo
pablo tomandola de la mano y llevándola a la mesa de la cocina. Ahí Mariana se
sento y Pablo le sirvió su desayuno. Mariana aun estaba media dormida asi que
no dijo nada. Solo pensaba para si misma “cumpleaños…?”.
Luego de desayunar volvió
al sillón. Todos estaban muy ocupados y nadie le prestaba atención. Hasta que
escucho el timbre.
Ella naturalmente
no fue a atender, fue Pablo exclamando “Ahí voooy!!”. Mariana escucho en voz
baja una conversación, pero no le presto atención. Hasta que de repente….
“Feliiiiz cumpleeeeeeee” – Dijo un señor. “Quien será ¿” Pregunto mariana. –
Awwww que linda que estas”- Dijo el señor. Mariana se sonrojo y pablo le dijo:
Decile gracias al señor “osita”. “que estúpido…” pensó Mariana y luego dijo:
gracias…
Repentinamente el
señor la tomo a Mariana, y comenzo a darle sus 7 nalgadas: 1 2 3 4 5 6 7. Mariana se sonrojo ante los
chirlos, pero se quedo quieta sin moverse.
-
Es muy timida no?- Dijo el señor.
-
Muchisimo- Se rio Pablo.
Pablo y el
continuaron charlando junto con Romina, y Mariana se alejo llendo hacia la
cocina a donde estaba Vanesa. Ya ahí se
sobo un poco la cola, y abrazo a Vanesa.
-
Nenita! Feliz cumpleaños!- Dijo
Vanesa, mientras continuaba cocinando.
-
Mami.. quien es el señor que
vino?- Pregunto Mariana. – Me pego en la cola…- Protesto.
-
Jajajajaj, seguro te dio tus 7
nalgadas por cumplir años.
Vanesa solto lo que
estaba haciendo, he hizo una pose juguetona acechante.
Mariana se tapo la
cola e intento salir corriendo, pero ella enseguida la atrapo. “1 2 3 4 5 6 7”.
Ahí esta, feliz cumple!.
-
Gracias… - Protesto Mariana con un
puchero y sobándose. Esto del cumpleaños no parecía mas que otra excusa para
nalguearla. – Voy a tener regalos?- Pregunto.
-
Sip, pero cuando vengan los demás.-
-
Quienes van a venir?-
Vanesa se tomo el mentón.-
Tu tio… tu Tia, y un par de amigos nuestros.- Explico Vanesa.
-Y yo soy la única nena?
- Tambien viene tus
dos primas.-
Mariana se quedo
pensativa.
-
No compraron un globo? O un
pelotero?-
-
No seas exigente Mari, gastamos
mucha plata en tus regalos.-
Con eso, Mariana
dejo de protestar y continuo jugando. No tenia ganas de estar cerca de “Adultos”
que le apretaban los cachetes y le decían cursilerías. Pero Pablo y Romina,
estaban charlando con ellos, y apenas ella se acercaba, se volvia el centro de
la atención.
-
A comer!!! – Exclamo Vanesa, y
todos se sentaron a la mesa.
Mariana aun se sentía
confundida. Lo ultimo que esperaba era una fiesta de cumpleaños. Pero igual
todo coincidia, era justo sábado. Como la habían mandado temprano a dormir el
viernes, nadie la saludo .
-
Y… Como esta la cumpleañera en su
dia?- Dijo el señor que recién había llegado.
Mariana bajo la
cabeza y no contesto.
-
No seas maleducada y contestale al
señor- Dijo Marcos.
-
Dejala amor… ella es muy timida y lo
sabes- Explico Vanesa.
-
Tu fiesta comienza a las 4 de la
tarde Marianita, pero Carlos vino antes para saludarte y almorzar con
nosotros.- Explico Marcos.
-
No te acordas de mi?- Pregunto carlos.
-
Seguro que no, te conoció de muy
chiquita- Respondio Vanesa.
Todo pareciera
tener una excusa.
Cuando terminaron
de comer, continuaron con los preparativos para la fiesta.
Cada vez que
llegaba un adulto, la saludaba a Mariana, y le daba sus 7 nalgadas, luego iba
con el regalo y lo dejaba en su habitación. “Por lo visto es sorpresa” pensó Mariana
sobándose. Si bien la escena era divertida, y muy vergonzosa, algunos realmente
se los daban fuertes, y mariana ya empezaba a sentir la cola adolorida. Medio
avergonzada abrazo a Pablo quien la mimo.
Ya habían llegado
entre 3 adultos, y 2 mujeres. Asi que todos ya charlaban muy intensamente,
sobre temas que Mariana no entendía. Por lo visto, eran profesionales.
-
Queres que jugué con vos hasta que
lleguen tus primas Mari?- Dijo Romina.
Mariana hizo
puchero y lo vio a Pablo. En verdad quería que el le preste atención. Okis…-
Respondio Mariana con un puchero. Y romina jugo a hacer palmas con ella.
Se aceercaron las
4, y Mariana estaba ansiosa y un poco nerviosa. “Fiesta de cumpleaños…?”
Pensaba. “Espero que no sea nada raro..”